Zaragoza, se erige como una de las joyas más cautivadoras del país. Con una riqueza turística, cultural y de entretenimiento, esta localidad ofrece un abanico impresionante de atractivos. Su emblema más icónico, que todos conocemos, es la majestuosa Basílica de Nuestra Señora del Pilar, una obra de arte barroca que se yergue majestuosa junto a las orillas del río Ebro.

Pero el patrimonio de Zaragoza no se limita a este punto culminante; la Catedral del Salvador, La Seo, el Palacio de la Aljafería y las muchas muestras del mudéjar aragonés completan este conjunto monumental de la ciudad. Los alrededores de Zaragoza son igualmente cautivadores, con pintorescos pueblos que salpican el paisaje histórico y te mostramos 5 pueblos tan bonitos como cautivadores.

Biel

En la comarca de las Cinco Villas de Zaragoza, se encaja en la sierra de Santo Domingo. Sus calles estrechas y sinuosas forman un trazado encantador alrededor del castillo-fortaleza, donde el casco urbano de Biel despliega un atractivo conjunto de casas populares y nobles. La iglesia de San Martín es uno de sus monumentos más destacados.

Daroca

Daroca, capital del valle del Jiloca, cuenta con una muralla imponente y un castillo formidable debido a su historia fronteriza con la corona de Castilla. Conocida como «la ciudad de los siete sietes» por su diversidad de monumentos, incluye la Mina de Daroca, una obra pública relevante del siglo XVI en Europa, además de su recinto amurallado, el castillo y la colegiata de Santa María.

Lituénigo

Entre historia y tradición Lituénigo, cerca del Parque Natural del Moncayo, destaca por los restos de su antiguo castillo transformado en viviendas en el casco urbano. La iglesia parroquial de la Purificación de la Virgen remonta al románico y alberga tesoros en su interior. El museo del Labrador exhibe más de 200 piezas de la vida tradicional de la zona.

Talamantes

Talamantes, en medio del Parque Natural del Moncayo, se enclava a los pies de las peñas de Herrera. Su casco urbano presenta arquitectura y tradición popular, con monumentos como la iglesia de San Pedro. Pero su entorno natural es impresionante y perfecto para el senderismo, con rutas como el GR-90 Tierras del Moncayo y Sistema Ibérico y el GR-260, conocido como «Calcenada» o Vuelta al Moncayo.

Uncastillo

Uncastillo, como su nombre indica, se alza con un castillo y atesora un rico patrimonio histórico-artístico, principalmente románico. Varias iglesias románicas, como San Martín, Santa María, San Juan, San Lorenzo y San Felices, dan testimonio de su relevancia histórica. El casco antiguo revela los restos del castillo, el barrio de la judería y elegantes residencias como la Casa Consistorial renacentista, el palacio de Martín el Humano y la Lonja.