La negociación del convenio colectivo del sector hostelero en Zaragoza parece haber alcanzado un punto muerto. Tras la última reunión celebrada este lunes, los sindicatos UGT, CC. OO., OSTA y MIT han manifestado su descontento por lo que describen como un «bloqueo» por parte de la patronal.

La propuesta de los empresarios, centrada en la flexibilidad laboral, ha encendido las alarmas sindicales. Según denuncian, la patronal plantea jornadas laborales de hasta 10 horas diarias, con solo 10 horas de descanso entre ellas, algo que consideran «a todas luces ilegal» y que atentaría contra el artículo 34 del Estatuto de los Trabajadores.

Estas demandas, según CC. OO., parecen estar alineadas con las recientes declaraciones del presidente de los hosteleros de España, José Luis Yzuel, quien manifestó que trabajar 10 horas no es negativo. Aunque posteriormente Yzuel se retractó, para el sindicato, estas palabras no fueron un simple comentario desafortunado sino una visión real de lo que se propone para el futuro convenio del sector en Zaragoza.

Dada la situación, los sindicatos están valorando distintas formas de movilización. Aunque aún no se ha especificado si estas serán huelgas completas o paros parciales, los trabajadores están decididos a aprovechar las próximas fiestas del Pilar como plataforma para visibilizar su descontento con las condiciones laborales actuales.

El malestar sindical se agudiza al comparar la situación con otras provincias aragonesas. Mientras en Huesca y Teruel se han alcanzado acuerdos con incrementos salariales y mejoras laborales, en Zaragoza las negociaciones parecen estancadas.

Los sindicatos recalcan que la hostelería, sector clave en la economía local, está sufriendo una devaluación salarial. Esto, sumado a los retos de conciliación laboral por los extensos horarios y trabajo en festivos, ha generado un aumento de vacantes, estimando más de 8.000 en el segundo trimestre de 2023, en plena temporada alta.

CC. OO., a través de un comunicado, ha instado a todos los actores del sector turístico a comprometerse con un modelo sostenible y laboralmente responsable, que priorice la profesionalización y el empleo de calidad, acorde con la rentabilidad del sector.