En este periodo de auge económico desde que finalizó la pandemia y, en los últimos meses, cuando la inflación se ha contenido, el sector empresarial está dando signos de repunte, que se traducen con buenos datos como los de exportaciones o los de empleo. Pero, en concreto, el sector de las start-ups en Aragón está viviendo un momento especialmente dulce.

Así lo indica la recién publicada cuarta edición del estudio sobre start-ups elaborado por CaixaBank Day One e IESE. En él se analiza la situación de 1.135 empresas españolas y portuguesas, de las que 34 son aragonesas. El dato más significativo de las compañías de la Comunidad es que este 2023 está previsto que dupliquen sus plantillas. En concreto, esperan pasar de 144 a 332 empleados.

Esta evolución va a ser posible gracias, entre otros aspectos, a que las start-ups aragonesas analizadas han logrado captar en su conjunto un total de 7 millones de euros de financiación. Actualmente, las empresas de la Comunidad cuentan de media con 4,2 empleados, y el objetivo es alcanzar cerca de la decena.

La muestra del estudio refleja una gran diversidad sectorial, siendo el de Viajes/Turismo, Salud, Impacto Social, Marketplace, Healthcare y Alimentos/Bebidas los que cuentan con una mayor concentración de start-ups.

Además de la mejora de las previsiones de generación de empleo, otro aspecto relevante en la evolución del sector de las start-ups detectado por el estudio es que los equipos fundadores tienen cada vez más experiencia laboral previa al emprendimiento, lo que contribuye a mejorar la competitividad y el éxito de las start-ups.