El mes de febrero del 2024 se perfila como un período que marcará récords meteorológicos en España, según la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET). Vivimos días con notables anomalías, con temperaturas hasta 10º por encima de lo habitual y una falta de lluvia que despierta preocupación.

La AEMET, vigilante de mapas del tiempo desfavorables, indica que este año se está comportando de manera inusual. Se ha pasado de un breve episodio invernal a un poderoso anticiclón, desplazando las temperaturas a niveles propios de la primavera en lugar del invierno. La semana que se esperaba como la más fría en este invierno resultó ser la más cálida en los últimos 80 años, confirmando una tendencia climática preocupante.

Expertos meteorológicos advierten que febrero no traerá buenas noticias. Aquellos que esperaban la llegada del invierno deben tener paciencia, ya que las cifras cambiarán, generando una situación anómala, según la duración prevista de la AEMET.

La próxima semana se caracterizará por un tiempo anticiclónico en gran parte del país, con cielos poco nubosos. Únicamente se esperan precipitaciones en áreas específicas como el Estrecho, con baja probabilidad en el extremo oriental del Cantábrico y en la confluencia de Alicante y Valencia. La persistencia de nubes bajas y nieblas matinales en diversas regiones añade complejidad a las condiciones meteorológicas.

Aunque se anticipa un pequeño respiro, las temperaturas seguirán por encima de lo normal, superando los 20º en muchas zonas durante la semana. Se espera un descenso térmico en Baleares y Canarias orientales, mientras que en el nordeste peninsular y Canarias occidentales las temperaturas aumentarán. Las heladas se restringirán a zonas específicas, pero en general, se mantendrán valores elevados para la época del año.

Los vientos, predominantes del este en general, podrían influir en algunos cambios, con intervalos de levante fuerte en el Estrecho y Alborán. Aunque la AEMET emite una alerta por posibles nubes bajas y nieblas matinales en varias zonas, no se anticipan grandes cambios en las temperaturas, manteniéndose elevadas para esta época. Las heladas se darán en áreas de montaña específicas, pero la incertidumbre climática persiste, dejando a la población en alerta ante la inusualidad de este mes de febrero.