Alberto Núñez Feijóo, líder del Partido Popular, ha manifestado su apoyo y reconocimiento a los miembros del PSOE que critican abiertamente las concesiones del presidente Pedro Sánchez al independentismo. De hecho, ante los potenciales pactos de Sánchez con el separatismo, ha afirmado que «fuera de la Constitución no hay democracia».

En un tono firme y claro durante su discurso de investidura, Feijóo ha denunciado el rumbo que toma el partido socialista al asumir las propuestas independentistas, lo que considera un cruce de «barreras antes infranqueables».

Una de las actitudes que más ha censurado es la tendencia a señalar y rechazar a aquellos miembros del PSOE que divergen de la línea oficial del partido, llegando incluso a purgar o marginar a quienes se muestran disidentes.

Según Feijóo, estos «socialistas discrepantes» no están anclados en el pasado ni idealizan tiempos anteriores. «No idealizan el pasado, sino que se sienten orgullosos de la Transición y de la democracia que construimos entre todos», ha subrayado.

El líder del PP ha continuado dirigiéndose directamente a estos socialistas, expresando su total apoyo y reconocimiento: «Tienen toda la razón y, por ello, tienen todo mi reconocimiento».

En una muestra de solidaridad, Feijóo ha querido hacerles saber que, a pesar de los ataques recibidos, su voz y esfuerzo son valiosos y no serán olvidados. Ha recalcado que, a pesar de los momentos actuales, un entendimiento entre los españoles es inevitable y necesario.

Feijóo no ha dejado de dirigirse a Sánchez, advirtiéndole que las actitudes y desplantes del líder socialista no influirán en su postura. Insistiendo en la necesidad de acuerdos entre el PSOE y el PP, ha reafirmado su disposición al diálogo y ha propuesto pactos a los socialistas.

Sin embargo, ha añadido con un tono irónico: «Seguiré tendiendo la mano hasta que llegue alguien en su partido con la determinación y el sentido de Estado suficientes para cogerla si es que no los ha echado a todos antes, claro».

El mensaje de Feijóo recalca la importancia de la unidad y el entendimiento en tiempos donde la polarización política parece ser la norma, poniendo en valor a aquellos que buscan el bienestar del país por encima de divisiones partidistas.

MÁS PENAS PARA DELITOS RELACIONADOS CON LOS SEPARATISTAS

Su idea es revocar la eliminación del delito de sedición, que fue impulsada por el Gobierno de Pedro Sánchez en su legislatura anterior. Según fuentes del PP, esta propuesta no sería un retorno exacto al anterior código, sino una versión «más amplia y exhaustiva», denominada «deslealtad constitucional».

Además, el PP contempla fortalecer las penas relacionadas con el delito de malversación, volviendo a las disposiciones previas a la reforma realizada por Mariano Rajoy en 2015, que fue posteriormente modificada por el PSOE y Unidas Podemos.

Feijóo, sin aguardar el enfrentamiento directo con Sánchez, ha puesto de manifiesto su postura crítica con el líder socialista. Ha subrayado la necesidad de adherirse a la Constitución como base de la democracia.

Durante su discurso, ha enfatizado la diferencia entre un candidato que sigue sus principios y defiende el interés general y aquel que no. «Este debate me define a mí, y lo hace también con usted, señor Sánchez», recalcó.

El principal eje de su argumento ha girado en torno a la cuestión de la amnistía. Feijóo ha censurado repetidamente la inclinación de Sánchez hacia acuerdos parlamentarios que, según él, menoscaban la «dignidad de la nación» y los fundamentos democráticos esenciales de España.

Invocando el «espíritu del 78», Feijóo ha resaltado su compromiso con sus valores y ha recordado figuras políticas catalanas como Miquel Roca y Jordi Solé Tura. Enfatizó que los avances en las décadas de 1970 y 1980 se lograron gracias a la unificación de criterios, como se evidenció en los pactos de la Moncloa. Además, ha recordado la cooperación histórica entre el PP y el PSOE en temas como el terrorismo, las pensiones y la lucha contra la violencia de género.

Finalmente, Feijóo ha advertido que detrás de esta investidura hay una elección crucial entre mantener la unidad nacional o profundizar en divisiones motivadas por agendas personales que no beneficiarán a la sociedad.