Sucedió en torno a las siete de la tarde del pasado domingo. Una madre y su hija de doce años disfrutaban de una jornada lúdica de fin de semana en el Parque de Atracciones de Zaragoza. Tras la intensa jornada con otros amigos, madre e hija se sentaban en una mesas preparadas para comer.
Con ellas se sentaba el novio de una amiga de la madre con quien entablaban una conversación delante de otros testigos. Según ha podido saber HOY ARAGÓN, por causas que se desconocen derivadas de la conversación entre los tres, la menor de doce años se levantaba de la silla con cierta brusquedad.
Según la descripción de los hechos por parte de los presentes, el hombre intentaba evitar que la menor que levantase con intención de marcharse del lugar agarrándola del hombro, momento en el que la niña intentaba zafarse de él comenzando un pequeño forcejeo entre ambos, todo ello en presencia de la madre de la menor.
Durante esta pelea, el a la postre detenido, ha «agarrado fuertemente de uno de sus pechos a la niña de 12 años», según se relata en la descripción de los hechos, circunstancia que ha obligado a intervenir a la madre de ésta.
La mujer, en medio de una gran tensión, agarraba del brazo al hombre y tiraba de él con la intención de que soltase el pecho de su hija, el cual tenía asido con fuerza. El hombre llegaba incluso a agredir a la madre agarrándole con fuerza de la muñeca para obligar a que ésta le soltase el brazo.
En ese momento soltaba a ambas y salía del lugar caminando. Casi en el mismo momento, la madre de la joven se dirigía a buscar al personal de seguridad del parque para contarles lo sucedido y dar una descripción del hombre que había desaparecido de la escena.
Es uno de los guardias del parque quien al final identifica al hombre y lo retiene en un lugar apartado de la zona del público mientras otro llama al 091 para solicitar la presencia de una patrulla de la Policía Nacional.
Uno de los agentes, nada más llegar, se entrevista por separado y de manera privada, tanto con la menor agredida como con una mujer que había sido testigo de los hechos. Ambas ratifican lo contado por la madre de la menor. Mientras, el hombre asegura que reaccionó así tras tener una discusión con su pareja.
«¡DISCULPA, DISCULPA!»
El día de los hechos se celebraba en el Parque de Atracciones una fiesta en honor al día de la independencia de Nicaragua. La madre llegó al parque con su hija, su hermana y su pareja así como dos parejas más de amigos.
Fue precisamente el hombre de una de estas dos parejas quien protagonizó el suceso y acabó siendo detenido por los policías por agresión sexual a una menor de edad. En la denuncia posterior una hora y media después, la madre puntualiza que el varón estaba bailando y cuando su hija se levantó para ir al baño fue cuando le obligó a sentarse y le manoseó los pechos.
Cuando la madre medió en el incidente, el hombre le dijo que le disculpara, pero ya era tarde y apartó a la menor lejos del alcance del presunto agresor. La mujer explicó a los agentes que conocía al hombre desde hace tres años y que «solía beber», pero nunca había protagonizado ningún incidente en su presencia.
el hombre, defendido por Luis Ángel Marcén y Carmen Sánchez, quedó en libertad a la espera de juicio y con el deber de cumplir una orden de alejamiento físico con respecto a la menor de 200 metros y la prohibición de comunicarse con ella de cualquier manera.
El castigo para este delito cuando se comete sin violencia o intimidación y no exista consentimiento es pena de prisión. Esta pena puede variar entre uno a tres años o con una multa de entre dieciocho a veinticuatro meses. Los abusos sexuales no consentidos según el Código Penal son los que se realizan entre o a menores de dieciséis años.