Francia, un país conocido por su riqueza cultural y arquitectónica, alberga un patrimonio inigualable que se despliega en sus numerosos castillos y fortalezas. Entre ellos, los castillos del Valle del Loira se destacan por su belleza y diversidad, conformando un conjunto monumental que atrae a miles de visitantes cada año. Sin embargo, más allá del Loira, otras fortalezas impresionantes se erigen a lo largo de la geografía francesa, maravillando a todos los viajeros que se aventuran a descubrirlas, como el Castillo de Peyrepertuse.

Este castillo es una fortaleza enclavada en un peñasco a 800 metros de altura en la región de Occitania. Conocido como el castillo cátaro más grande de Francia, este bastión ofrece una vista panorámica inigualable de la región de Corbières y el valle del río Agly, convirtiéndose en un punto de interés cultural e histórico destacado.

EL CASTILLO DE PEYREPERTUSE: UN EMPLAZAMIENTO DE GRAN IMPORTANCIA HISTÓRICA

El nombre de Peyrepertuse proviene del occitano “Pèirapertusa”, que significa “piedra perforada”, aludiendo a las formaciones rocosas características de la zona. La primera referencia documentada de este castillo data del año 1050, cuando pertenecía al condado de Besalú. Durante el siglo XIII, en el marco de la Cruzada Albigense, el castillo, bajo el control de Guillaume de Peyrepertuse, se convirtió en un refugio esencial para los cátaros perseguidos y un punto estratégico en la defensa contra el reino de Aragón.

A pesar de su resistencia, el castillo nunca fue asediado. Sin embargo, tras el fracaso del sitio de Carcasona, Guillaume de Peyrepertuse rindió el castillo a Luis IX, rey de Francia. En esta época se construyó la Torre del Norte o Torre de San Jorge, reforzando aún más las defensas de la fortaleza. La inquebrantable estructura de Peyrepertuse le ganó el apodo de la “Catedral de los Cátaros”.

DOS RECINTOS Y UNA IGLESIA

La arquitectura del Castillo de Peyrepertuse se divide en dos recintos principales: el viejo castillo y la Torre de San Jorge. El viejo castillo, correspondiente a la estructura original del siglo XI, se sitúa en la parte baja y solo es accesible a través de una estrecha puerta protegida por una barbacana. Presenta una planta triangular y una muralla de más de 100 metros de longitud, flanqueada por torres semicirculares. En su interior, un patio central organiza las diversas construcciones, destacando la torre del homenaje y la capilla de Santa María Bastida, que data del año 1115.

El nuevo castillo, edificado por Luis IX, se encuentra en lo alto del promontorio rocoso y conforma una fortaleza dentro de otra. Entre sus elementos más significativos se encuentra la escalera de San Luis, construida al borde del desfiladero, y la capilla de San Jordi.

CÓMO VISITAR EL CASTILLO DE PEYREPERTUSE

El Castillo de Peyrepertuse es uno de los monumentos más visitados de la región de Occitania. Abre sus puertas durante todo el año, excepto los días 24, 25 y 31 de diciembre, y el 1 de enero. Los horarios de visita varían según el mes:

Junio: 9 h – 19 h

Julio-Agosto: 9 h – 20 h

Septiembre: 9 h – 19 h

Octubre: 10 h – 18 h

Noviembre: 10 h – 17 h

Diciembre: 10 h – 16:30 h

En cuanto a los precios, la tarifa general es de 8€, con una tarifa reducida de 7€. Los grupos de al menos 20 personas pagan 6€, los menores de entre 6 y 12 años 4,50€, y los menores de 6 años pueden entrar gratis.

EXPLORANDO LA RUTA DE LOS CASTILLOS CÁTAROS

La región de Occitania no solo alberga el Castillo de Peyrepertuse sino que también forma parte de la conocida Ruta de los Castillos Cátaros. Esta ruta conecta varios castillos históricos que sirvieron de refugio a los cátaros durante la persecución del siglo XIII. Entre estos se encuentran el Castillo de Quéribus, el Castillo de Puilaurens, y el Castillo de Montségur, cada uno con su propia historia y características arquitectónicas únicas.

Viajar por la Ruta de los Castillos Cátaros ofrece a los visitantes la oportunidad de sumergirse en la historia medieval y disfrutar de paisajes espectaculares. Las fortalezas, situadas en altas colinas y acantilados, proporcionan vistas impresionantes y son testigos silenciosos de un pasado turbulento. Esta ruta es ideal para aquellos interesados en la historia, la arquitectura y la naturaleza, ofreciendo una experiencia enriquecedora y educativa.

CONSERVACIÓN Y VALOR CULTURAL

El Castillo de Peyrepertuse no solo es un monumento histórico sino también un símbolo de la rica herencia cultural de Francia. Su conservación es crucial para mantener viva la memoria de los eventos que marcaron la historia de la región. Las autoridades locales y organizaciones dedicadas al patrimonio trabajan continuamente para preservar y restaurar estas estructuras, garantizando que las futuras generaciones puedan apreciar y aprender de estos tesoros arquitectónicos.

El Castillo de Peyrepertuse es una visita obligada para cualquier amante de la historia y la arquitectura. Su impresionante ubicación, su rica historia y su magnífica arquitectura lo convierten en uno de los castillos más notables de Francia. Ya sea explorando sus recintos antiguos, admirando las vistas panorámicas o siguiendo los pasos de los cátaros, una visita a Peyrepertuse promete ser una experiencia inolvidable.