Las vías ferroviarias entre Zaragoza y Tarragona volverán a vibrar al ritmo del histórico Tren Azul este 30 de septiembre, ofreciendo a los pasajeros un evocador recorrido hacia el pasado.

Alsa, reconocida compañía de movilidad, ha asumido la titánica labor de operar este convoy de tiempos idos, que ha sido restaurado meticulosamente por la Asociación Zaragozana de Amigos del Ferrocarril y Tranvías (AZAFT).

El Tren Azul es un espejo de los expresos que antaño surcaron Europa en la mitad del siglo pasado, siendo testigos mudos de historias, anécdotas y recuerdos.

La nostálgica travesía se originará en la Estación de Zaragoza-Delicias, donde los entusiastas viajeros serán acogidos por personal vestido al estilo de época, rememorando el esplendor y elegancia de aquellos días.

El serpenteante trazado, que discurre por la vía de Mora de Ebre, desvelará las maravillas del valle del Ebro. Los afortunados pasajeros serán testigos de la belleza de lugares emblemáticos como La Puebla de Híjar, Samper de Calanda – famosa por su tradición en Semana Santa de «romper la hora» – o Ascó, donde el perfil de la Central Nuclear se yergue majestuoso.

La travesía ferroviaria alcanzará un punto álgido al cruzar el río Ebro en Mora la Nova. Posteriormente, se adentrará en el misterioso Valle del Priorato, culminando su descenso hacia las aguas del Mediterráneo, no sin antes pasar por Reus, con su rica herencia modernista.

Tarragona, el destino final, promete a los viajeros un viaje en el tiempo con su rica historia romana. Aquí, podrán disfrutar de un tour guiado por el espectacular conjunto arqueológico, una joya del patrimonio mundial protegida por la UNESCO desde el año 2000.

Para aquellos que deseen vivir esta experiencia única, los boletos están disponibles en www.alsa.es y www.trenazul.es, con opciones de partida desde las estaciones de Zaragoza-Delicias y Zaragoza-Goya.

Este viaje no es solo un trayecto entre dos ciudades, es una inmersión en la riqueza cultural y patrimonial de España, un recuerdo vivo de la elegancia y el glamour de la era dorada del tren.