Desde su descubrimiento por VN Gladilin en 1974, el yacimiento arqueológico de Korolevo ha sido el foco de numerosos estudios que arrojaron luz sobre la ocupación de homínidos durante varios cientos de millas de años en Europa. A pesar de no encontrar fósiles humanos, las evidencias abundan, consolidando a Korolevo como un sitio clave de ocupación temprana en zonas del continente.

En el corazón de Ucrhttps://hoyaragon.es/mundo/espana-gas-ruso/ania, este yacimiento ha revelado siete capas culturales con 33 fragmentos de herramientas de piedra volcánica tallada, proporcionando una visión única de la historia de nuestros antepasados. Aunque la datación precisa de los restos había sido esquiva, un equipo internacional liderado por el Dr. Roman Garba ha transformado por completa nuestra comprensión.

LA INVESTIGACIÓN

La investigación, de cuatro años de duración, empleó un innovador enfoque de datación que combina datos de campo, modelos climáticos y un método de medición de nucleídos cosmogénicos. El resultado es asombroso: los restos de Korolevo tienen una antigüedad de 1,42 millones de años, marcando la presencia más antigua datada con seguridad de homínidos en Europa.

El Dr. Garba, en declaraciones exclusivas, destaca el uso pionero de esta técnica y subraya la importancia de Korolevo al convertirse en el yacimiento arqueológico más antiguo de Europa, fechado con certeza en la presencia de homínidos. Aunque no se han encontrado restos humanos, la presencia de herramientas talladas en piedra sugiere la residencia de Homo erectus en la región mucho antes de la transición del Pleistoceno Medio.

KOROLEVO

La relevancia de Korolevo se magnifica al superar, en términos de antigüedad, al famoso yacimiento español de Atapuerca, según la nueva medición. El Dr. Garba, con elegancia, reconoce la grandeza de Atapuerca y destaca la posición única de Korolevo como un eslabón esencial en el mosaico que desentraña el viaje de los primeros homínidos en Europa.

Este descubrimiento no solo impacta en la historia de los homínidos sino que también despierta interrogantes sobre la colonización de Europa desde el este. La ubicación estratégica de Korolevo conecta los restos del Cáucaso con el suroeste de Europa, completando el viaje de los homínidos de este a oeste por el antiguo continente.

Aunque persisten incertidumbres sobre los detalles de cómo ocurrió la dispersión, este hallazgo sugiere una nueva ruta para los homínidos desde África. El equipo científico espera que esta revelación llene la «enorme brecha espacial y temporal» entre los yacimientos del Cáucaso y el suroeste de Europa, proporcionando una perspectiva única sobre la primera dispersión humana en el continente.

La datación precisa de Korolevo, con 1,42 millones de años de antigüedad, establece este yacimiento como el punto medio temporal y espacial en la colonización homínida de Europa. Este artículo busca posicionar la palabra clave ‘homínidos’ al resaltar la relevancia y las implicaciones del descubrimiento en Korolevo en la historia evolutiva de Europa.