La organización agraria catalana Unión de Uniones ha realizado este martes una tractorada ante la sede, en Zaragoza, de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) para exigir a la Administración General del Estado que «asuma responsabilidades» por las pérdidas en la agricultura y la ganadería ocasionadas por la sequía.

Decenas de agricultores con carteles de Unió de Pagesos se han concentrado ante la CHE, a cuyos responsables han exigido que elabore un informe «transparente» sobre la gestión que ha llevado a cabo de los recursos de la cuenca del Ebro.

Entre otras reivindicaciones, han tildado de «escaso» el Real Decreto aprobado por el Gobierno de España y han reclamado «medidas extraordinarias adicionales para garantizar la supervivencia de los agricultores catalanes y del resto del Estado con graves dificultades».

LA CHE, FUERA DE ZARAGOZA

Esta tractorada no ha pasado desapercibida en las organizaciones agrarias aragonesas ARAGA, ASAJA, UAGA-COAG y UPA, las cuales creen que la tractorada celebrada por agricultores catalanes en la sede de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) tiene «un trasfondo político». Estas fuentes consultadas defienden que la Generalitat busca que las decisiones sobre la cuenca del Ebro se tomen en Cataluña y no en Zaragoza. La situación no es nueva. La Generalitat catalana siempre ha querido dividir la unidad de cuenca del Ebro y tener más capacidad de decisión, tanto en la visión política de la gestión hídrica como en la gestión administrativa.

La tractorada a la que aluden los colectivos aragoneses, convocada por Unió de Pagesos, ha congregado a cerca de 300 personas y medio centenar de vehículos con el fin de solicitar a la CHE que “presione” al Gobierno central ante la situación que vive el campo, además de “transparencia” al organismo a la hora de informar acerca de los usos del agua. En el trasfondo de la manifestación, aseguran las organizaciones reivindicativas que si la Confederación Hidrográfica del Ebro estuviera en Cataluña habría más poder de convicción o de presión.

Para las organizaciones agrarias de Aragón, esta protesta “se realiza en el momento menos oportuno” y, aunque han señalado que comparten con los agricultores catalanes “la preocupación por la situación de sequía”, consideran que la tractorada “tiene un trasfondo político que busca que las decisiones sobre la cuenca del Ebro se tomen en la Generalitat”. Al respecto, han destacado que no van a permitir “que se rompa la unidad de cuenca” y han solicitado a los convocantes de esta movilización “que dejen de presionar a la CHE”.

Por último, ARAGA, ASAJA, UAGA-COAG y UPA han subrayado la necesidad de realizar “una profunda reflexión” sobre el reparto de fondos que se establece en el Real Decreto de medidas por la Sequía, donde Aragón apenas ha recibido 15 millones de euros y las cuencas catalanas más de 200 millones.

En concreto, esta norma recoge ayudas para la realización de actuaciones en las demarcaciones hidrográficas, con inversiones de 220 millones de euros para las cuencas internas de Cataluña, de 200 millones para las cuencas mediterráneas andaluzas y de “tan solo” 16,6 millones de euros para la Demarcación Hidrográfica del Ebro, “a pesar de ser una de las zonas con mayor afección y de mayor regadío del Estado”.