Tarazona ha dado por comenzadas sus fiestas patronales en honor a San Atilano este martes con la salida del Cipotegato. Es una de las celebraciones más emblemáticas y esperadas del año, declarada Fiesta de Interés Turístico Nacional. Tras 25 años participando en el sorteo, Luis Javier Abril, de 51 años, ha cumplido su sueño de ser Cipotegato. A mediodía ha salido del Ayuntamiento vestido con el característico traje de arlequín en colores amarillo, rojo y verde, y ha comenzado su carrera bajo una lluvia de casi 10.000 kilos de tomates lanzados por miles de personas congregadas en la plaza de España y calles colindantes.

El Cipotegato 2024 ha recorrido más de un kilómetro en unos 15 minutos, cruzando por las principales calles del centro de Tarazona, incluidas la plaza del Palacio Episcopal, la calle San Juan o el puente de la Catedral, para regresar finalmente a la plaza de España. Allí, en medio de una marea blanquiazul, el Cipotegato ha escalado la estatua que lleva su nombre, desde donde ha saludado a la multitud con el pañuelo azul que había solicitado previamente al igual que su antecesora Raquel Azagra en 2023.

Asimismo, ha pedido el despliegue de una pancarta con el mensaje “Gracias Tarazona” en agradecimiento a toda la localidad. “Es impresionante, hay que estar ahí, ser de Tarazona, presentarse al sorteo tantos años, estar arriba, llevar este traje y ver la cara de todas las personas de la plaza…Es impresionante, no tiene nombre”, ha detallado tras llegar al ayuntamiento.

Con emoción, ha declarado que se ha acordado de su padre fallecido que además ha plasmado en su camiseta y su madre y su mujer que lo esperaban en el Ayuntamiento. “También he hecho un homenaje a Fernando y Jorge que han fallecido recientemente y en cuanto sus familiares me lo pidieron, no dudé”.

Abril, que llevaba 25 años presentándose a ser Cipotegato, ha esperado pacientemente poder lograrlo. “Llevaba mucho tiempo intentándolo. Los sueños hay veces que si que se cumplen y éste se ha cumplido. Todos los años decía que era el último que me presentaba y este año tenía algo especial”, ha recalcado. “He cumplido el mayor sueño que puede tener un turiasonense”, concluía.

La fiesta del Cipotegato es el evento que oficialmente inaugura las fiestas en honor a San Atilano. El alcalde de Tarazona, Tono Jaray, ha destacado la importancia de esta tradición: “Siempre lo había vivido desde fuera, me sorprende la emoción que se vive dentro del ayuntamiento, siempre es emocionante hasta para la gente que es de fuera”. Jaray también ha incidido en el trabajo en equipo y las fuerzas y cuerpos de seguridad. “Tenemos un gran equipo (…), ahora los servicios de limpieza son los encargados de dejarlo todo como estaba. Las peñas también son fundamentales. Todo eso hace que la fiesta cada vez sea más grande. La mejor publicidad de la fiesta es que los que han venido se lo hayan pasado de maravilla”, ha explicado.

El concejal de Festejos, José Antonio Docando, también ha subrayado la diversidad de la programación de este año: “Ahora tenemos seis días por delante de fiestas con la feria taurina, conciertos del parking de la catedral, mucha diversión, más de 300 actos para todas las edades y públicos. Ahora toca disfrutar, pasarlo bien con responsabilidad”, ha señalado.

Las fiestas, que se extenderán hasta el 1 de septiembre, incluyen una variada programación que abarca desde actividades infantiles, actos religiosos, hasta conciertos y eventos culturales. Toda la programación al detalle puede consultarse en el programa, a la venta por 3 euros en las oficinas de Cultura y Turismo de Tarazona y en imprentas y papelerías de la ciudad. También se puede consultar aquí.