El llamado síndrome post-vacacional, también conocido como estrés o depresión postvacacional, es el proceso de adaptación necesario cuando finalizan los días de vacaciones del verano y se vuelve de nuevo a la vida diaria, con el exceso de trabajo, el estrés y la sensación de no llegar a nada. Hasta que el cuerpo y la mente se acostumbran y readaptan de nuevo a ese ritmo de vida y a los horarios de siempre, solemos sufrir ese síndrome, con distintos grados de ansiedad, presión emocional o sensación de cierta tristeza.
Para combatir esa sensación de vacío que todos sufrimos en mayor o menor medida tras varias semanas sin obligaciones, no hay nada mejor que intentar romper con la rutina y apuntarse a alguna actividad que nos haga sentir bien y que nos permitan hacer algo diferente entre semana con el fin de evitar caer en la rutina. Y por suerte, en Zaragoza tenemos múltiples opciones para poder llenar nuestros momentos de ocio y hacer más llevadera la vuelta a la rutina.
TALLERES DE CERÁMICA
Desde la pandemia, hay un boom de talleres cerámicos que permiten crear piezas de cerámica con nuestras propias manos. Desde ese momento, muchos sintieron la necesidad de trabajar con sus manos. Y la cerámica se convirtió en una estupenda opción al ser una actividad manual relajante que favorece la creatividad y el bienestar mental. En ciudades como Madrid y Barcelona hay desde hace años una eclosión de locales cerámicos, y en Zaragoza, también hay un despunte de este tipo de locales donde es posible hacer un taller para aprender a crear piezas artesanas.
En la capital aragonesa hay varios talleres donde podemos apuntarnos a clases de cerámica. El último en llegar ha sido Pizco Cerámica (plaza San Pedro Nolasco, 2), donde hay talleres tanto de modelado como de torno. En Appetit Ceramics (calle Doctor Cerrada, 14) hay talleres varios días a la semana y en distintos horarios, tanto semanales, como puntuales. También puedes apuntarte a La Benditera (Cantín y Gamboa, 17), donde ofrecen cursos intensivos y clases regulares, adquiriendo bonos por distintas horas, o participar en alguna experiencia tematizada).
RESTAURACIÓN DE MUEBLES
Si crees que eres más de restaurar que de crear, en la capital aragonesa hay opciones para aprender a restaurar muebles. En La Termita Zaragoza (calle Las Armas, 44), hay cursos de restauración y transformación de muebles, algo muy valioso si tienes algún mueble viejo, o si quieres dar un aire nuevo a tu casa sin tener que renovar el mobiliario. También hay otros cursos como el de iniciación a la carpintería o incluso un curso de bricolaje de supervivencia, para aprender distintas tareas de bricolaje, electricidad o fontanería.
En el taller de restauración La Falsa (calle Cariñena, 2) también tienen clases para que puedas restaurar tú mismo esos pequeños tesoros que todos tenemos por casa y que queremos recuperar: desde una cómoda a un baúl o un marco.
TALLERES CON FLORES
Si te gusta la decoración y tener la casa siempre llena de flores, seguro que te gustan los cursos florales que organizan en El Buen Jardinero (Porvenir, 15). Entre los talleres que han preparado en esta floristería para el mes de septiembre para crear composiciones elegantes y darle un toque personal a tus espacios, hay opciones como el taller de Libros Florales, el taller de Jarra Bretaña, o el de Bolsos florales Romanov.
CURSOS PARA APRENDER A COCINAR (O PARA APREDER NUEVOS PLATOS)
Entre los hobbies que podemos practicar en este inicio de curso, además de los cursos de restauración, o de la tan de moda cerámica, no podían faltar los cursos de cocina. Y a la hora de aprender a cocinar, o para descubrir nuevos platos y técnicas, La Zarola (San Miguel, 35), es un clásico. Para este mes de septiembre, hay cursos de croquetas gourmet, de paellas y arroces, de cocina sana y creativa, o de cocina italiana, de alta cocina para cocinar en casa, o de ramen, entre otros muchos.
En la Escuela Profesional de Gastronomía y Cocina Azafrán (San Antonio Abad, 21), ofrecen talleres para aficionados, con temáticas que van desde las tapas creativas a talleres de cocina creativa y sostenible con la Huerta de Zaragoza, pasando por un curso de cocina moderna de autor.