El Ayuntamiento de Zaragoza ha presentado este viernes el nuevo modelo de autobús eléctrico en el que se basará la renovación de su flota a partir de finales de 2022. Se trata del ie tram, un autobús de líneas futuristas desarrollado por Irizar e-mobility con el que, además de evidenciar el cambio a una tecnología cero emisiones, se dará un giro en el aspecto estético de los autobuses urbanos de la capital aragonesa. El vehículo se quedará en pruebas en la ciudad a lo largo de las próximas tres semanas y prestará servicio principalmente en la línea 23, con capacidad para operar con autobuses dobles.

En su intervención la consejera municipal de Movilidad del Consistorio zaragozano, Natalia Chueca, ha recordado la apuesta del Gobierno de la ciudad por una movilidad urbana sostenible, donde todos los autobuses que se incorporen a la flota sean eléctrico. Se trata de una apuesta por convertir a la ciudad en climáticamente neutra, ha apostillado Chueca, comentando que en la actualidad se dispone de cuatro buses de cero emisiones, 111 híbridos y el resto, 352, diésel.

DISEÑO

Sobre su diseño, la consejera ha explicado que tiene este vehículo 100% eléctrico tiene unos atributos estéticos que «combinan las ventajas del tranvía –gran capacidad, facilidad de acceso y circulación interior– con la flexibilidad del autobús». Este modelo se desarrolla en versiones desde 12 metros hasta 18 articulado, con una capacidad máxima de 145 personas. Sus baterías están desarrolladas y fabricadas por Irizar de Litio-Ion. El Irizar ie tram ofrece un diseño que parte de un lenguaje estético «minimalista», sin ornamentos, y en el que todos sus rasgos responden a aspectos funcionales concretos, permitiendo crear una identidad y una imagen fácilmente reconocibles por los usuarios.

Según Chueca, la accesibilidad, la seguridad, el flujo de circulación y el confort del pasajero son características «determinantes» en un habitáculo «luminoso, confortable, espacioso, agradable y seguro». Además, a petición de la DGT, están dotados con un sistema de seguridad para detección de usuarios vulnerables, es decir, los conductores recibirán una señal para avisar del paso de ciclistas o peatones de manera cercana al vehículo, para evitar accidentes.

Para lograr una estética de tranvía, se han cuidado los detalles, tales como los tapacubos, y hasta los retrovisores, que han sido sustituidos por cámaras que proyectan sus imágenes en dos pantallas situadas en el interior del vehículo de cada lado del conductor. El ie tram dispone de piso bajo integral, señalización de los puestos reservados a sillas de ruedas y/o carro infantil, información sonora de la solicitud de parada. La disposición de los asientos en el interior del vehículo permiten que las entradas y salidas de los viajeros en las paradas y la circulación interior se desarrollen «de forma muy fluida».

Para llevar a cabo este objetivo, el Gobierno de Zaragoza ha aprobado este miércoles una modificación contractual con la empresa Avanza, concesionaria del transporte urbano por autobús en la ciudad. Dicho cambio hará posible la incorporación de 68 nuevos autobuses eléctricos al servicio. De ellos, 51 serán de tamaño estándar, de 12 metros, y el resto, 17, serán articulados, de 18 metros. Se incorporarán progresivamente al servicio a partir del último semestre del año próximo.

El director general de Avanza, Valentín Alonso, ha considerado que este es el «mayor proyecto de electromovilidad que ha habido en España hasta la fecha» y «uno de los más ambiciosos a nivel europeo». «Implementar a la vez 70 autobuses eléctricos, que es casi el 25 por ciento de la flota no es solo sustituir vehículos diésel por vehículos de propulsión eléctrica, sino que es un proyecto de ingeniería de grandísimo calado que nadie hasta la fecha ha tenido la capacidad ni el coraje de abordar», ha añadido Alonso, valorando que esta acción va a suponer un cambio en el día a día de los zaragozanos.

En esta línea se ha pronunciado el alcalde de Zaragoza, Jorge Azcón, quien ha destacado que la capital aragonesa «ha pasado de ser la última gran ciudad en incorporar autobuses eléctrico a su flota a ser la ciudad de España de referencia en la transformación de la movilidad urbana».