La aragonesa Grupo LOBE siempre se ha caracterizado por su apuesta por la innovación, tanto en los métodos constructivos, como en la tecnología empleada. Ahora ha dado un nuevo paso en Zaragoza con la instalación de la primera fachada off-site en la capital aragonesa. Lo ha hecho en su promoción Aqua Brisa, que actualmente se está levantando en Arcosur.

Se trata de un residencial compuesto por 130 viviendas libres que se entregarán el próximo año. Esta es una de las grandes ventajas de esta nueva técnica de construcción: es posible instalar 100 metros cuadrados de fachada diarios. En este caso, se va a utilizar esta fórmula para colocar un total de 500 m2 semanales.

Este nuevo tipo de fachada industrializada es un prefabricado completo que revoluciona la construcción. Las fachadas se elaboran en el centro de fabricación de Grupo Lobe, Combo Building Systems SL, e incluyen acabados, hermeticidad y aislamiento en una única pieza.

Además, vienen equipadas con carpintería colocada, aislamiento y sellado de hermeticidad, optimizando aún más el proceso constructivo. Este avance ha posicionado a Grupo LOBE como la primera empresa en España en utilizar este tipo de fachadas en edificios Passivhaus.

Desde el ladrillo tradicional hasta la innovadora fachada actual, Grupo LOBE ha reducido el tiempo y los residuos de manera significativa. La fachada tradicional de ladrillo requiere 32 semanas y 16.300 horas en promedio. Mientras tanto, esta nueva fachada industrializada marca un descenso del 72% en semamas, un 83% menos de horas y un 92% menos de residuos.

Al minimizar los procesos constructivos in situ, se reduce la dependencia de la habilidad y experiencia del personal de obra, garantizando un trabajo de alta calidad desde el inicio.