Con el claro objetivo de mantener el liderato, así afrontaba la SD Huesca su partido contra el Burgos en el estadio del Alcoraz. Cuarta jornada liguera y segundo choque del equipo de Hidalgo ante su afición, en una temporada en la que el inicio no puede ser más ilusionante en tierras altoaragonesas. 

Antonio Hidalgo alineaba un once formado por Dani Jiménez, Toni Abad, Jorge Pulido, Blasco, Rubén Pulido, Vilarrasa, Javi Pérez, Sielva, Joaquín, Soko y Sergi Enrich. El choque comenzó con el Huesca algo replegado y dejando la iniciativa al Burgos. Los azulgranas buscan salir rápido con a velocidad de Soko y Joaquín. 

Vilarrasa probó fortuna a los 10 minutos con un disparo lateral que se fue desviado, en un partido en el que poco a poco, la SD Huesca iba teniendo el control del juego y posesiones cada vez más largas. Apareció Dani Jiménez para evitar el tanto de Curro, en la mejor ocasión visitante. Curro volvió a golpear contra la meta oscense, pero Dani Jiménez volvió a realizar una gran intervención para negarle el gol al delantero. 

La segunda parte comenzó con la entrada de Gerard Valentín y Javi Mier. Pronto se le complicó el encuentro a la SD Huesca, con la roja directa que veía Vilarrasa. Un contratiempo importante, que hacía peligrar el partido para los altoaragoneses. 

El choque transcurría con empate hasta el minuto 77’, cuando Córdoba puso el 0-1 en el electrónico del Alcoraz. Javi Mier buscó el tanto del empate en el 80’, pero su disparo se fue desviado. Lo intentó el Huesca de todas las formas posibles, pero los de Hidalgo cosechaban la primera derrota de la temporada, en un partido duro frente a un Burgos que aprovechó su superioridad. 

Tras este partido, la SD Huesca jugará frente al Málaga en el estadio de La Rosaleda. Un partido frente a un recién ascendido, pero uno de los históricos del fútbol español.