Eboca, empresa oscense líder en el sector de máquinas expendedoras a nivel nacional, ha emprendido un proyecto innovador centrado en la sostenibilidad y la diferenciación. Aprovechando los posos de café, que anteriormente eran considerados residuos de su actividad, Eboca los ha convertido en un valioso nutriente ecológico para los suelos de los viñedos, otorgándoles una segunda vida a estos desechos.

Con más de 40 años de experiencia, Eboca ha ganado reconocimiento como una de las principales empresas del sector en España. Fundada por Raúl Benito en 1982, la compañía ha destacado por su compromiso con la calidad y la autenticidad de sus productos. Rompiendo con la percepción negativa asociada al café de máquina, Eboca ofrece una bebida de alta calidad, ecológica y de comercio justo, utilizando leche auténtica, algo poco común en el sector.

Por todo ello, con el impacto que realiza Benito y Eboca a favor de la sostenibilidad, el Ayuntamiento de Zaragoza y CIRCE- Centro Tecnológico- ha incluido su historia como un caso de éxito en la descarbonización de las empresas locales dentro del Foro «Zaragoza a la vanguardia de la neutralidad climática en Europa», que va a tener lugar el próximo 22 de marzo.

Un evento donde empresas nacionales e internacionales compartirán estrategias, experiencias y oportunidades de colaboración en materia de descarbonización.

PREGUNTA. ¿Cuál es la importancia de la colaboración público-privada para lograr los objetivos climáticos de la ciudad?

RESPUESTA. La colaboración es clave y que cada uno actúe coherentemente también. El Estado representa, a través de las distintas administraciones, la mitad del PIB y eso obliga a políticas públicas alineadas con los objetivos. 

¿Qué consejos de soluciones o buenas prácticas daría Zaragoza a las otras ciudades europeas para instaurar y mantener una colaboración público-privada que soporte la acción climática de la ciudad?

Zaragoza tiene una interesante trayectoria de «ciudad piloto» en la que se debe profundizar. Estar a la vanguardia en soluciones y estrategias es bueno para la estrategia medioambiental y también para la imagen y la posición de Zaragoza en el mundo. Deberíamos ser aún más audaces.

¿Cuál es su comprensión de los impactos del cambio climático y por qué Eboca considera importante la descarbonización?

En Eboca somos personas al servicio de personas e incorporamos a nuestra manera de actuar lo que entendemos que demandan nuestros clientes y la sociedad a la que pertenecemos. 

Eboca ha obtenido el Premio RSA por su destacado proyecto Fertcafé, que consiste en transformar los posos de café en un valioso recurso: un biofertilizante ecológico. ¿Puede detallarnos con más precisión en qué consiste?

Hasta la puesta en marcha de Fertcafé los posos que se generan al elaborar cada café iban a la basura. Ahora los recogemos todos, más de 70 toneladas, y en colaboración con Defeder los transformamos en abono que se utiliza en los viñedos de Viñas del Vero en el Somontano.

De esta manera cerramos un círculo virtuoso. Cultivamos ecológicamente el café en Colombia, lo traemos directamente sin intermediarios, lo tostamos en nuestro tostadero ecológico, lo transportamos en vehículos eléctricos, reutilizamos los envases, lo servimos en vasos de papel o tazas reutilizables, transformamos los posos en abono ecológico y además nos podemos tomar un buen vino.

¿Qué oportunidades de innovación y desarrollo de productos han surgido como resultado de la transición hacia la descarbonización?

Fertcafé es un excelente ejemplo pero existe también un importante campo de innovación en la reutilización de envases y en el diseño de procesos. 

¿Cuál es el próximo paso importante en el camino hacia la descarbonización para Eboca y qué medidas están tomando para alcanzarlo?

Mejora de procesos, avanzar en la electrificación de la flota y reducción de envases.