Reinos míticos como el de los Mallos, monasterios en los que se fraguó el origen del Reino de Aragón, castillos imponentes que permitieron la reconquista al sur de los Pirineos, leyendas como las del Santo Grial, el poder de las órdenes militares…
El Gobierno de Aragón ha lanzado 7 rutas para conocer la historia de la Corona de Aragón, ideales para hacer escapadas y disfrutar del patrimonio y de los paisajes que fueron protagonistas en la formación de una Corona que se expandió desde los valles pirenaicos hasta Nápoles, Atenas, o Neopatria.
Estas rutas, repartidas por todo el territorio aragonés, tienen como objetivo poner en valor el patrimonio histórico artístico de la Comunidad para contar cómo fue la historia de la Corona de Aragón para evitar que nadie la tergiverse, desmontando mitos como el del inexistente reino de Cataluña.
LA RUTA DE LA CORONA DE ARAGÓN
Esta ruta pretende recorrer el periodo histórico comprendido entre el nacimiento del reino de Aragón hasta la época de expansión hacia el Mediterráneo. Para conocer (y comprender ese tránsito de varios siglos), la ruta nos lleva desde los parajes pirenaicos de los condados de Ribagorza y Sobrarbe, a Jaca (primera capital aragonesa) y los valles occidentales.
La ruta también nos lleva por la ciudad de Huesca, la comarca del Somontano de Barbastro, Cinca Medio, o los Monegros, sin olvidarnos de ciudades situadas más al sur, como Caspe, Zaragoza, Alcañiz, Calatayud o Teruel.
SANTO GRIAL
Los lugares que dieron origen el Reino de Aragón son el escenario en el que se ha diseñado esta ruta, que hace mención al Santo Grial, depositado durante muchos años en el Monasterio de San Juan de la Peña antes de ser traslado a la catedral de Valencia.
Además de este monasterio, cuna del Reino, la ruta propone visitar localidades como Bailo, Jaca, San Adrián de Sasabe, Yebra de Basa, Huesca, y el palacio de la Aljafería, en Zaragoza.
REINO DE LOS MALLOS
Los Mallos de Riglos, además de ser una de las formaciones naturales más sorprendentes y visitados de nuestra Comunidad, son el eje en torno al cual se articula el Reino de los Mallos. El origen de este reino se encuentra en la dote que el rey Pedro I de Aragón entrega a su segunda
esposa, la reina Berta, con motivo de sus esponsales.
La dote de la boda comprendía un pequeño territorio en el Prepirineo oscense: Agüero, Murillo, Riglos, Marcuello, Ayerbe y algunos bienes en la Hoya de Huesca a orillas del río Flumen. Y esta ruta nos propone conocer lugares como Agüero, Bolea, Ayerbe y el Castillo de Loarre.
RUTA TRAS LOS PASOS DE ALFONSO I
El rey Alfonso I El Batallador fue una figura clave en la expansión y consolidación del reino. Y esta ruta recorre algunos de los lugares relacionados con él. Desde el monasterio de San Pedro de Siresa (donde se educó), hasta Zaragoza, ciudad que conquistó a los musulmanes en 1118, convirtiéndola en la nueva capital aragonesa. La ruta nos lleva también al castillo de Montearagón, al monasterio de San Pedro el Viejo en Huesca, o a la ciudad de Fraga.
RAMIRO II EL MONJE
La leyenda de la Campana de Huesca, articula esta ruta que nos lleva a Huesca, San Úrbez de Nocito, Tierrantona, Real Monasterio de San Victorián, Roda de Isábena y Barbastro. Cuenta la leyenda que Ramiro II, preocupando por la desobediencia de algunos de sus nobles, envió un mensajero a su antiguo maestro, el abad de San Ponce de Tomeras, pidiéndole consejo sobre esta situación.
El abad llevó al mensajero hasta el huerto y cortó las coles que sobresalían más, ordenándole que le contara al monarca aragonés lo que había visto. Ramiro II hizo llamar a los nobles para que fueran a Huesca, con la excusa de hacer una campana que se oyera en todo el reino. Y una vez allí, hizo cortar la cabeza a los nobles más destacados sofocando de este modo la revuelta y dando lugar así a la leyenda de la Campana de Huesca.
LA ORDEN DEL CÍSTER
La Orden del Císter tuvo gran poder en el viejo Reino de Aragón. Y esta ruta recorre los monasterios cistercienses aragoneses más importantes, aproximándonos además a algunas de las localidades que hay en su entorno. Así, esta ruta nos propone visitar el monasterio de Veruela, Tarazona, y Grisel (donde hay que visitar el pozo de Aines y el castillo), el monasterio de Rueda y Caspe (con la iglesia del Compromiso) y el Monasterio de Piedra y Calatayud.
LAS ÓRDENES MILITARES
Las órdenes militares fueron clave en la expansión del Reino de Aragón, teniendo gran poder e influencia especialmente en la zona sur y oriental del reino. La fuerte presencia de estas órdenes en territorio aragonés se remonta al testamento del rey Alfonso I, que al morir, repartió el reino entre templarios, hospitalarios y caballeros del Santo Sepulcro.
Para conocer su legado, esta ruta nos lleva por enclaves de comarcas como el Matarraña, Bajo Aragón o el Maestrazgo, en los que estas órdenes tuvieron especial poder, visitando localidades como Alcañiz, Valderrobres, Castellote, Cantavieja, Montalbán, Mirambel, Mora de Rubielos y Rubielos de Mora.