Santorini, Mykonos, Creta, Corfú… nombres que evocan imágenes paradisíacas y que inundan nuestras redes sociales cada verano. Sin embargo, la masificación y el alto coste de los billetes aéreos han llevado a muchos a buscar alternativas igualmente hermosas y más asequibles. En este contexto, la costa de Turquía se presenta como una opción poco conocida pero igualmente encantadora.
Situada literalmente frente a las codiciadas islas griegas, la costa turca comparte aguas cristalinas y turquesas, pero con la ventaja de no estar abarrotada ni viralizada en las redes sociales. Con playas de ensueño que parecen no tener fin, este destino abarca las provincias de Antalya, Esmirna, Aydin, Mugla y parte de Mersin, ofreciendo más de 1000 kilómetros de belleza.
Descubriendo la costa turca
Actividades y paradas imperdibles
Antalya
Puerta de entrada a la Costa Turquesa, su casco antiguo cautiva a quienes buscan autenticidad.
Kekova
Hogar de ruinas sumergidas de una antigua ciudad, donde sarcófagos y restos de teatros emergen desde las profundidades.
Kaş
Ciudad costera pintoresca y destino favorito en la Riviera turca. Sus playas vírgenes atraen tanto a amantes del sol como a quienes buscan emociones con actividades como el buceo y el parapente.
Myra
Antigua ciudad de Licia con tumbas excavadas en la montaña, aunque, lamentablemente, saqueadas en el pasado.
Amyntas
Alberga tumbas datadas en el año 350 a.C. que contienen los restos del rey de Telmessos.
Playa de Kaputas
Un paraíso de aguas turquesas y gravilla fina para los amantes de la playa.
Cómo llegar
Si decides explorar esta joya, tienes opciones para llegar. El vuelo desde Estambul hasta los aeropuertos clave de Antalya y Dalaman es la opción más común. Alternativamente, una red de autobuses bien desarrollada recorre la mayoría de los destinos turísticos, permitiéndote moverte eficientemente por el país.
Aunque las distancias en autobús pueden ser largas, la experiencia de descubrir la costa turca, menos conocida pero igual de deslumbrante, promete un viaje inolvidable. No te lo pienses más, y descubre un paraíso que aún aguarda ser explorado.