España destaca no solo por su encanto cultural y climático, sino también por ser un destino turístico asequible. Según el Ministerio de Industria y Turismo, el país atrajo a 71.6 millones de turistas internacionales el año pasado, generando un gasto de 87.061 millones de euros. Además de sus atractivos tradicionales, la asequibilidad se ha convertido en un imán para los viajeros.

Una investigación exhaustiva de la entidad Omio ha revelado que cuatro ciudades españolas han conquistado el ‘top 10‘ de las 100 ciudades más baratas para viajar por Europa. Valencia, Sevilla, Málaga y Granada se destacan, ofreciendo numerosas atracciones gratuitas, convirtiéndolas en opciones ideales para escapadas durante todo el año.

Granada: la joya asequible de Europa

Granada se lleva la corona como la ciudad más barata para viajar en Europa, según el estudio de Omio. Con más de 100 actividades gratuitas, incluida la visita a la Alhambra, y 10 museos de acceso libre, Granada ofrece una experiencia rica sin agotar los bolsillos. Además, con visitas turísticas asequibles y una animada escena nocturna con cervezas a poco más de 2 euros, la ciudad andaluza se presenta como una joya turística asequible.

Valencia, Sevilla y Málaga: tesoros de bajo coste

Valencia ocupa el segundo lugar en el ranking, siendo la cuarta ciudad más barata de Europa. Con 125 actividades gratuitas, 12 museos sin coste y una amplia oferta de visitas guiadas a precios accesibles, la ciudad invita a los viajeros a explorar sin restricciones financieras.

Sevilla, en el octavo lugar, destaca con más de 200 actividades gratuitas, 10 museos de entrada gratuita y más de 100 atracciones sin coste. Málaga, justo después, se consolida como la novena ciudad más barata de Europa, ofreciendo 115 actividades gratuitas, 7 museos y 59 atracciones turísticas sin cargo.

Omio y el estudio de asequibilidad

Omio realizó su estudio seleccionando los destinos turísticos más populares en ocho países europeos. Evalúan la idoneidad para viajes de bajo presupuesto considerando actividades, alimentos, bebidas e infraestructuras. La comparación justa entre ciudades se logra utilizando valores por cada 100,000 habitantes, y los resultados se estandarizan en una escala de 0 a 100. Este enfoque meticuloso revela a Granada como la joya más asequible de Europa y coloca a España en la cúspide de destinos turísticos accesibles.