Parece que con la llegada del verano, la ciudad se vacía; de gente, y de actividades interesantes… Pero nada más lejos de la realidad. Un buen ejemplo lo tenemos en Quema, el restaurante del IAACC Pablo Serrano.
Si comer o cenar en este restaurante del centro de Zaragoza siempre es una buena opción, en verano, el atractivo se redobla gracias a las cenas que ofrecen en la azotea del edificio diseñado por José Manuel Pérez Latorre.
Hasta ahora, y desde el inicio del verano, las cenas en la azotea solo estaban disponibles los jueves. Pero dado el éxito que está teniendo entre los zaragozanos, el restaurante del museo ha decidido ofrecer dos sesiones a la semana, ampliando la oferta también a los viernes durante todo el mes de agosto.
Las cenas se ofrecen en el Espazio Quema, un salón climatizado situado en la azotea del edificio desde el que se pueden disfrutar de unas vistas espectaculares de la capital aragonesa. Y dada la alta demanda, es mejor reservar, ya que hay plazas limitadas en cada pase.
El menú cuesta 45 euros, y está elaborado por la chef Diana Roitegui junto con el resto del equipo del Quema, consta de tres aperitivos (Crujiente de coco y curry, Regañá, mousse de pastel de puerros y huevas de trucha imperial, y Macaron de avellana y morcilla) y cinco platos (Gazpacho de maíz, ceviche de langostinos y boniato, Guiso de calamar en su tinta, espuma de cebolla caramelizada y arroz inflado, Milhojas de anchoa del Cantábrico, crema de queso tronchón y pimiento rojo, Pescado del día, salsa exótica de crustáceos, pesto de guisantes y pistachos, chips de kale y Taco de Rabo de vaca guisado con un toque de sake y mirin, crema de coliflor y crujiente de patata).
En el menú de este restaurante que cuenta con un Sol Repsol también se incluye un postre (Mo-ji-to, bizcocho y crema de lima, gel de ron y helado de hierbabuena), y media botella de vino por persona.
UN SOL REPSOL
El Quema es uno de los restaurantes ya clásicos dentro del panorama de la alta cocina zaragozana gracias a una propuesta de cocina de temporada y natural dentro de un espacio que es una prolongación gastronómica del arte contemporáneo.
Además del menú degustación que se sirve en la azotea durante el verano, este restaurante zaragozano tiene ofrece un menú gastronómico disponible de martes a viernes a medio día con dos entrantes, un principal y un postre por 30 euros, y la carta, disponible de martes a viernes al mediodía y jueves noche..