Aragón vuelve a situarse en el mapa cinematográfico mundial al convertirse en una de las localizaciones elegidas para la próxima gran producción del universo Marvel. Los impresionantes paisajes naturales del río Gállego, especialmente en las áreas de los Mallos de Riglos y Murillo de Gállego, han sido seleccionados para dar vida a escenas de acción acuáticas que prometen dejar sin aliento a los espectadores.
Esta nueva incursión de Marvel en Aragón no solo destaca la belleza y versatilidad de sus paisajes para la gran pantalla, sino que también subraya la capacidad de la región para albergar producciones cinematográficas de envergadura internacional, ofreciendo una infraestructura y colaboración institucional de primer nivel.
Este rodaje marca un hito para la región, al ser la segunda vez que Marvel opta por escenarios aragoneses para sus producciones, tras las escenas de batalla rodadas en el Pueblo Viejo de Belchite para la saga de Spiderman en 2018.
La producción, en busca de locaciones que emularan los rápidos característicos de los ríos en el estado de California, contactó a principios de 2023 con la Aragón Film Commission. Tras una búsqueda exhaustiva a nivel nacional, se decidió que las provincias de Zaragoza y Huesca albergarían este ambicioso proyecto. Aunque inicialmente el rodaje estaba previsto para finales de 2023, una huelga en Hollywood obligó a reprogramar las fechas, comenzando finalmente a fines de enero de este año. De todas formas, aún se desconoce estas imágenes para que película van destinadas.
El trabajo de coordinación institucional jugó un papel crucial para la obtención de los permisos necesarios, gestionando de forma eficiente y rápida los trámites con los márgenes ajustados. A mediados de febrero, el equipo de producción ya estaba en terreno, contratando servicios locales y preparando todo lo necesario para las complejas escenas de acción. Más de 140 personas formaron parte de esta segunda unidad de rodaje que trabajó intensamente del 5 al 7 de marzo, después de haber pasado por localizaciones en Alicante, Almería y Cartagena.
La implicación local ha sido notable, con más de veinte profesionales de la zona integrándose al equipo internacional. Entre ellos se encontraban ‘runners’, ‘blockers’, asistentes de producción y localizaciones, así como expertos en actividades acuáticas. La hostelería de Murillo de Gállego, Ayerbe y Huesca ha experimentado el impacto y la relevancia de este elenco, alojando a los equipos de rodaje durante aproximadamente un mes.