El recién investido alcalde de Alcañiz, Miguel Ángel Estevan (PP), se sincera con HOY ARAGÓN sobre qué significa para él este nuevo cargo y cómo afronta la legislatura como primer edil de su localidad. Confiesa que lleva a Alcañiz en el corazón y que quiere ser un alcañizano más. En su anterior etapa fue senador por la provincia de Teruel pero reconoce que esto no tiene nada que ver.

¿Cómo afronta esta nueva etapa como alcalde de Alcañiz?

Estoy muy orgulloso de ser el alcalde de mi ciudad y es un honor. Además, un alcañizano como yo lo vive desde el corazón. Esta ciudad necesita levantar la cabeza y ser de nuevo un referente como ha sido siempre en el Bajo Aragón Histórico.

En el discurso de investidura se mostró claramente emocionado. ¿Qué significa Alcañiz para usted, sobre todo ahora que es su alcalde?

Cuando me presenté a las elecciones dije que si ganaba y salía alcalde me iba a tatuar Alcañiz en la muñeca y así ha sido. Hacerme un tatuaje es una de las cosas que no hubiera hecho en la vida. Con eso se lo digo todo (risas). Llevo Alcañiz en el corazón y quiero ser un alcañizano más. Además, solo quiero ser alcalde de Alcañiz, no quiero otro tipo de cargo porque éste así lo requiere. Cuando formas parte de otras instituciones inviertes tiempo, un tiempo que le quitas a la atención al ciudadano.

Ha manifestado que quiere ser el alcalde del diálogo. ¿Cómo se materializa esta declaración de intenciones?

Mi referencia a José María Pascual, que fue alcalde de todos los alcañizanos. Era una persona que hablaba con todo el mundo y no hacía distinciones entre quienes le habían votado y quienes no. Yo quiero dar cariño a todos los alcañizanos, hablar con todos los vecinos, recibirles y estar en la calle. Esto se ha echado de menos en la anterior legislatura. Alcañiz necesita un alcalde cercano y que esté encima del ciudadano, preocupado por la situación de la ciudad.

¿Cuáles son las necesidades más urgentes en Alcañiz?

A corto plazo, tenemos pendiente construir un parking en la zona centro para impulsar el comercio y ser referente comercial en el Bajo Aragón. Además, hay que acometer el cerramiento de la pista roja, una pista deportiva que está descubierta y que se podrá usar para festejos patronales o eventos deportivos. A largo plazo, es necesaria una colaboración estrecha con Motorland y Technopark para acercar esas dos potencias, así como dar a conocer y potenciar el impresionante patrimonio histórico y artístico que tiene Alcañiz.

¿Qué problemas se ha encontrado encima de la mesa?

Uno de los retos más importantes de esta legislatura es zanjar el asunto del cerro de Pui Pinos. Hace seis años se derrumbó, sin daños personales pero sí materiales y varios vecinos perdieron sus casas. Hay que buscar la mejor solución técnica y atajar este problema.
En cuanto a las comunicaciones, la autovía con Zaragoza es una prioridad y, aunque no es competencia municipal, Jorge Azcón ya sabe que con este tema voy a ser el alcalde de sus pesadillas. De la misma forma, insistiré a Fomento. Por otro lado, un asunto importantísimo que nos afecta a todos es el de las ambulancias. Alcañiz y el Bajo Aragón necesitan una ambulancia los 365 días las 24 horas.

Ha sido investido con mayoría absoluta. ¿Qué valoración hace de este punto de partida?

Mi objetivo cuando me presenté era ser la lista más votada y ganar las elecciones. Así fue, gané con un concejal más que la oposición. Después, tras la primera ronda de contactos, mi intención era gobernar en minoría pero tanto VOX como el PAR se pusieron a mi disposición. Confío y sé que juntos vamos a trabajar para dar la estabilidad que necesita este Ayuntamiento.