Las asignaciones destinadas por el Ayuntamiento de Zaragoza a las ayudas de urgente necesidad continúan en aumento debido al incremento de la inflación a nivel nacional.

A tan solo un mes de concluir el año, el consistorio ya ha asignado cerca de 12 millones de euros para las familias que residen en la capital aragonesa y que, de manera puntual, necesitan dinero para atender sus necesidades más básicas. Estas subvenciones están llegando a prácticamente todos los solicitantes que cumplen con los requisitos, concretamente al 93%.

En los 10 meses transcurridos de 2023 se han registrado 40.966 solicitudes de ayudas de urgencia en la red de centros municipales de servicios sociales y que, con respecto al mismo periodo del año anterior, esta cifra supone un aumento cifrado en un 2,94%. De ese total, 38.006 subvenciones fueron concedidas este año, es decir, 641 familias más han recibido una ayuda en comparación con 2022. 

La consejera de Políticas Sociales, Marian Orós, ha querido resaltar el “compromiso del Gobierno de Zaragoza con todos sus ciudadanos y, muy especialmente, con los que más lo necesitan en el día a día”.

Sobre cómo se están repartiendo, la alimentación continúa en el primer lugar, con el 71,49% de las ayudas, un aumento del 6,62% respecto a 2022. Las siguientes fueron el alquiler con un 12,78% y la electricidad con el 2,86% de las ayudas. También se cubren otros conceptos como comedores escolares, guardería, salud bucodental, ropa o hipotecas. 

El importe medio de las ayudas se eleva a 313,49 euros, un 6,57% mayor que en el mismo periodo del año anterior. El número de familias zaragozanas que han percibido estas prestaciones supera las 13.000, percibiendo alguna de ellas más de un concepto.

La partida para ayudas de urgencia es de 15,4 millones de euros, aumentándose en más de seis millones de euros de los 9,4 millones presupuestados en 2019. El nivel de ejecución del mismo está en torno a un 77%. 

A este respecto, Orós ha aseverado que a lo largo de estos años “ la estrategia ha sido la de presupuestar de manera holgada, porque es imposible saber exactamente las necesidades de urgencia que van a tener las familias zaragozanas durante el año y creo que es un acierto”. 

No obstante, la consejera ha querido poner en valor “la mejor gestión y el esfuerzo presupuestario” y recalcar que, si hay un sobrante en la partida este, preferentemente, se revierte en Políticas Sociales.