A los malos resultados del Real Zaragoza hay que sumar la plaga de lesiones que sufre el conjunto maño. El último en caer ha sido Víctor Mollejo, que sufre un traumatismo nasal que le ha ocasionado una fractura de los huesos propios, por lo que precisará el uso de una máscara durante las próximas semanas.

El jugador, de acuerdo con los servicios médicos del club y tras ser valorado por el Dr. Jorge Alfaro, Jefe de Servicio de la Unidad de Otorrinolaringología en el Hospital Quironsalud de Zaragoza, ha optado por el tratamiento conservador en este momento y la intervención en un segundo tiempo al final de temporada.

Esta misma semana, el Real Zaragoza informaba que Quentin Lecoeuche sufre una lesión miotendinosa a nivel del bíceps femoral de su pierna derecha, mientras que el delantero Ivan Azón también presenta una artropatia a nivel de su rodilla derecha. 

Estos jugadores lesionados se suman a Sinan Bakis, que sufre una meniscopatía sin fecha de vuelta, Cristian Álvarez, que se sigue recuperando de una rotura de fibras y Carlos Nieto, que tuvo que pasar por el quirófano y no estará disponible hasta dentro de unos meses. 

Se espera que Cristian Álvarez se vaya reintegrando a los entrenamientos grupales en los próximos días, aunque es probable que no vuelva a jugar con el equipo hasta después del parón navideño.

Todas estas bajas ya las sufrió Fran Escribá, que tampoco pudo contar varios partidos con Francho Serrano y Fran Gámez. Ahora será Julio Velázquez el que tendrá que encontrar soluciones, con varios jugadores del filial entrenando con el primer equipo y que podrían tener protagonismo en los próximos encuentros.