Que los precios de la vivienda se han estancado en Zaragoza en el último trimestre, siguiendo la tendencia de los mayores núcleos urbanos españoles, contrasta con la tendencia alcista que está experimentando la costa mediterránea.

Según la estadística Tinsa IMIE General y Grandes Mercados, el precio medio de la vivienda nueva y usada en España se incrementó un 0,3% entre abril y mayo, que sitúa la variación interanual en el 4,8 %, un nivel más moderado que en el mes anterior y que en mayo de 2022. El análisis por zonas, sin embargo, muestra comportamientos dispares entre las áreas con mayor recepción de turismo y el resto.

Frente a los incrementos mensuales del 0,1 % y el 0,3% registrados en los entornos urbanos (capitales y áreas metropolitanas), en las zonas de perfil turístico la estadística muestra incrementos de valor más acusados: un 0,9 % en la costa mediterránea, zona que recupera el nivel de precios de enero tras los retrocesos de febrero y marzo.

HOY ARAGÓN ha rastreado el mercado de las zonas costeras más frecuentadas por los aragoneses, y los precios siguen al alza en localidades turísticas de alta demanda, que van desde Sitges, pasando por toda la Costa Dorada, así como por localidades valencianas como Peñíscola, Oropesa o Benicásim.

En Sitges, que tradicionalmente ha sido una de las áreas más cotizadas de la costa catalana, los precios en el portal inmobiliario Fotocasa parten de los 152.000 euros un piso en una urbanización lejos del núcleo urbano, de 2 habitaciones y 42 metros cuadrados. Si lo que se busca es obra nueva, las promociones parten de los 485.000 euros lo más económico (3 habitaciones, 102 m2), que tampoco está en primera línea de playa.

La localidad sufre en los precios de sus inmuebles una tormenta perfecta: está cerca de Barcelona, por lo que es una opción de primera residencia para quienes trabajan en la capital catalana. Además, los pisos turísticos han encarecido los inmuebles y la oferta es escasa.

Otra de las playas más demandadas por los zaragozanos, Calafell, cuenta con oportunidades más económicas, siempre que se considere estar lejos de la primera línea de playa. Lo más sencillo sería un piso de 49 m2 y una habitación en Segur de Calafell, por 38.250 euros. Por su parte, las oportunidades de obra nueva parten de los 150.000 euros (64 m2 y una habitación).

Bajando más al sur, en la playa que tradicionalmente se ha conocido como la de Zaragoza, Salou, dada su proximidad, presenta precios desde los 85.000 euros por un piso de 45 metros cuadrados. De obra nueva en la localidad, descartando municipios periféricos, no hay promociones a la venta.

Ya más abajo del delta del Ebro, en una zona que gana interés para segundas residencias de habitantes de la provincia de Teruel, la localidad de Peñíscola cuenta con opciones muy modestas a partir de 65.000 euros. En lo que respecta a obra nueva, existen posibilidades a partir de 100.300 euros (3 habitaciones y 92 m2).

Por su parte, el municipio castellonense de Benicásim presenta ofertas a partir de los 100.100 euros en la zona del pueblo. La obra nueva es escasa y de grandes dimensiones. Parte de los 253.000 euros una vivienda de tres habitaciones y tres baños, con 113 metros cuadrados.