La oferta inmobiliaria en el centro de Zaragoza se renueva con propuestas que mezclan el encanto de lo antiguo y las comodidades de la modernidad, haciendo realidad el sueño de muchos de residir en un espacio único y bien ubicado.

Entre las joyas que actualmente capturan la atención de futuros compradores, destaca un edificio independiente en el pintoresco barrio de La Magdalena, listado por 320.000 euros en el portal Idealista.

Este inmueble, de cinco plantas y 300 metros cuadrados útiles, se ubica en la calle Jusepillo de Olleta, disfrutando de una envidiable cercanía al Coso y a escasos minutos de la emblemática basílica del Pilar.

La construcción data de 1936 y fue objeto de una completa rehabilitación en 2009, resultado en un hogar bañado en luz natural gracias a ventanas en casi todas sus estancias y balcones en varios niveles.

Consta de una atractiva buhardilla, una amplia bodega que incorpora comedor, cocina y chimenea, cinco dormitorios generosos y dos baños, convirtiéndose en una opción idónea para familias extensas o aquellos que disfrutan hospedando a amigos y familiares.

Completamente amueblada y equipada con los electrodomésticos necesarios, la casa garantiza un ambiente acogedor y listo para habitar. El sistema de calefacción, operado mediante gas natural, asegura confort en los meses más fríos. Además, su ubicación no solo brinda acceso inmediato a servicios esenciales y ofertas culturales, sino que también ofrece excelentes conexiones de transporte público.

Paralelamente, aquellos en búsqueda de una vivienda con carácter y en el corazón de Zaragoza, encontrarán una oportunidad única en un dúplex situado en la calle Espoz y Mina. Este inmueble, parte de un antiguo palacete y actualmente en proceso de subasta con un precio de salida de 99.000 euros, se presenta como una alternativa llena de potencial. Distribuido en dos niveles, incluye un hall, salón-cocina, dormitorio y baño en la planta baja, además de un espacio versátil abuhardillado en la superior.

El dúplex destaca por su luminosidad, con ventanas en todas las áreas y un balcón esquinado accesible desde el dormitorio y el salón. La ausencia de mobiliario y electrodomésticos ofrece a los compradores un lienzo en blanco para personalizar a su gusto. Equipado con calefacción individual por gas y preparación para aire acondicionado, promete ser un hogar confortable y estilizado.