«Estamos en alerta 4 y seguiremos así mucho tiempo», explican a HOY ARAGÓN fuentes cercanas a la lucha antiterrorista. La captación de reclutas hace años que se produce de manera virtual y la guerra se está librando actualemente en la ‘social media’.
Se dan ejemplos cada día, aunque lo nos detengamos a verlos. Hace solo unos días en Pamplona, la Policía Nacional detenía a un hombre acusado de poseer cientos de manuales para la captación de lo que se conoce como ‘lobos solitarios’ o células durmientes.
Los primeros son todavía más peligrosos porque «puede ser cualquiera», dicen las mismas fuentes consultadas. Desarraigados, segundas y terceras generaciones de migrantes que se ven sin u futuro claro en Europa, buscando identidad y refugio.
Estos son los objetivos, los que buscaba el detenido en Pamplona que según fuentes policiales, había jurado fidelidad al actual Califa de la organización terrorista, Abu Hafs Al-hashimi Al-Qurashi, reconociendo con ello su pertenencia a la organización terrorista, alineándose con sus objetivos y realizando actividades en su favor.
Asusta pensar que, según explican fuentes antiterroristas, la mayoría de estos captadores de ‘lobos solitarios’ detenidos eran cazados a través de las redes, a pesar de sus estrictas medidas de seguridad.
En sus ordenadores encuentran manuales para la elaboración de explosivos, detonadores, venenos, consejos para ocultar la actividad terrorista en Internet, realización de transacciones financieras seguras, uso y manejo de todo tipo de armas, reclutamiento o captación de nuevos combatientes.
UNA GUERRA «ETERNA»
El GAR, Grupo de Intervención Rápida de la Guardia Civil, detuvo en noviembre de 2022 en el barrio zaragozano de La Magdalena en Zaragoza a un joven que con tan solo 18 años se había especializado por los manuales colgados en las redes por captadores en explosivos y pretendía viajar para luchar en zonas de conflicto en las filas del DAESH, conocido como EStado Islámico.
Es un goteo incesante que nucna para, dicen los investigadores, y para el que hay que estar siempre alerta. Quince detenidos en España y Marruecos en el último años da una pequeña idea de esta lucha «eterna», según explican estas fuentes consultadas, contra un terrorismo que esconde dentro de una funda de corte religioso causar daño y dolor.
La prisión de Zuera tiene entre sus internos a algunos de estos captadores que hace un año también promovieron una campaña de agresión y ataques a funcionarios de prisiones. Mensajes que se difunden en canales con cientos de seguidores y que buscan despertar al ‘lobo’.