Eran cerca de las once de la noche del pasado 6 de octubre. Una llamada al COS, el centro de Urgencias de la Guardia Civil, advertía del robo en una granja en la localidad zaragozana de Maluenda.

Había saltado la alarma y habían visto a varias personas en el interior de las instalaciones de la explotación ganadera a través de las cámaras de seguridad. Apenas quince minutos más tarde, una patrulla de servicio de la Guardia Civil interceptaba un vehículo en las inmediaciones.

En ese momento todo transcurrió muy rápidamente. El conductor del vehículo, sin posibilidad de huir, fue detenido, mientras que el otro ocupante salió huyendo pero también acabó en las dependencias de la Benemérita apenas unos días después.

Los detenidos, un hombre de nacionalidad española y otro de nacionalidad rumana, de entre 40 y 45 años, llevaban en el interior de su coche en el que salía del lugar de los hechos tres corderos degollados que habían sacado de la granja.

Los habían matado dentro del recinto y antes de meternos en el vehículo para que no les oyeran en caso de ser detenidos en algún control tras el aviso del robo con fuerza.

AUMENTO DE ROBOS ANTES DE NAVIDAD

Existe, según fuentes consultadas por HOY ARAGÓN, un aumento de robos en granjas de animales como aves, pavos o corderos, antes de las fechas navideñas. Por eso, las unidades de seguridad ciudadana de la Guardia Civil intensifican estos días las vigilancias en núcleos ganaderos.

Durante todo el año, no obstante, hay un plan para la vigilancia de explotaciones agrícolas y ganaderas que se intensifica durante estas fechas. Patrullas de Seguridad Ciudadana, Tráfico, SEPRONA o Grupo ROCA mantienen una vigilancia intensa en los meses de noviembre y diciembre.

Se da la circunstancia de que el dueño de la explotación en Maluenda ya había sido víctima antes de robos similares pero, por causas que se desconocen, no había denunciado hasta ahora. Los dos detenidos han sido puestos en libertad con cargos.