La Cascada de Sorrosal, ubicada en el idílico entorno del Pirineo aragonés, es un tesoro natural en el corazón del Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido, en la provincia de Huesca, España. Este rincón de belleza sobrecogedora ha conquistado los corazones de los turistas, convirtiéndose en un destino popular gracias a su impresionante caída de agua y actividades al aire libre.

HISTORIA

Con alrededor de 30 millones de años de historia, el área de Broto revela sus orígenes glaciares, testigos de la fusión del hielo y el torrente que esculpieron este paisaje. Los aventureros que exploran la vía ferrata pueden incluso descubrir fósiles marinos incrustados en la roca, resaltando la riqueza geológica de este lugar.

CARACTERÍSTICAS

Con una altura cercana a los 30 metros, la Cascada de Sorrosal se presenta como una de las más impresionantes de España. Alimentada por el río Sorrosal, fluye a través de un cañón de angosto antes de bailar en una piscina natural. Una pasarela de madera invita a los visitantes a acercarse, sumergiéndose en la experiencia visual y auditiva única que ofrece.

SENDEROS

La ruta hacia la cascada es amigable, ideal para disfrutar en familia, y revelar tesoros como el Puente de Oto, preludio a la caminata. El sendero se sumerge en la vegetación, mostrando la huella del agua que ha esculpido el arroyo que desemboca en el río Ara.

AVENTURA EN LA CASCADA DE SORROSAL

La Cascada de Sorrosal no solo encanta por su vista, sino que también atrae a los amantes de la aventura. Senderismo, barranquismo, picnic en áreas de descanso y hasta acampar son actividades que los visitantes pueden disfrutar. Para los intrépidos, la vía ferrata o un emocionante descenso en rapel desde la cascada ofrecen experiencias únicas y memorables.

ACCESO A BROTO

Llegar a este paraíso natural desde Huesca es accesible en coche. La ruta a través de las carreteras N-330 y N-260, con desviaciones a Broto, lleva un estrecho sendero que guía hacia la cascada. También, el transporte público conecta Huesca, Sabiñánigo y Broto, facilitando la visita.

CULTURA

La Cascada de Sorrosal es más que un atractivo turístico; es un punto de encuentro para la comunidad local. Durante festivales y eventos especiales, este lugar cobra vida con celebraciones y narrativas que resaltan la historia y tradiciones arraigadas en la zona. Para muchos residentes, el agua de la cascada no solo refresca, sino que también se le atribuyen propiedades curativas, convirtiéndola en un espacio sagrado. En la Cascada de Sorrosal, la naturaleza se fusiona con la cultura, ofreciendo una experiencia completa para todos los visitantes.