La laguna de Gallocanta, ubicada en el Campo de Daroca, es un santuario de biodiversidad que cautiva a los amantes de la naturaleza y a los científicos por igual. Con una superficie variable que oscila entre las 5.000 y las 7.000 hectáreas dependiendo de las lluvias, esta laguna es el hogar temporal de una rica variedad de especies, tanto aves migratorias como residentes, así como de una interesante flora adaptada a las duras condiciones de su entorno.

BIODIVERSIDAD AVIAR

La laguna de Gallocanta es conocida principalmente por ser un importante punto de descanso y alimentación para miles de aves migratorias durante sus travesías estacionales entre Europa y África. Entre estas destacan las grullas, que realizan una parada estratégica en esta laguna para reponer fuerzas durante su largo viaje migratorio. Se estima que más de 20.000 grullas visitan la laguna cada año, convirtiéndola en uno de los lugares más importantes de Europa para observar a estas majestuosas aves.

Además de las grullas, la laguna de Gallocanta acoge a una variedad de otras aves migratorias, como ánsares comunes, patos, cigüeñuelas, avocetas y chorlitos, entre otros. Estas aves encuentran en la laguna un hábitat propicio para descansar y alimentarse antes de continuar su viaje migratorio.

CONSERVACIÓN EN LA LAGUNA DE GALLOCANTA

La importancia ecológica de la laguna de Gallocanta ha llevado a que sea declarada como Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA) y Lugar de Importancia Comunitaria (LIC). Estas designaciones buscan proteger y conservar tanto la fauna como la flora de este ecosistema único, así como promover un uso sostenible de sus recursos.

La gestión de la laguna de Gallocanta se centra en mantener el equilibrio ecológico del ecosistema, garantizando la conservación de las especies que dependen de ella para su supervivencia. Esto incluye medidas como la regulación de los niveles de agua, el control de la vegetación invasora y la promoción de prácticas agrícolas y ganaderas sostenibles en los alrededores de la laguna.

TURISMO SOSTENIBLE

La laguna de Gallocanta también es un destino popular para el turismo ornitológico y la observación de aves. Numerosos visitantes acuden cada año para disfrutar del espectáculo de la migración de las grullas y para avistar otras especies de aves que habitan en la zona. Para garantizar que esta actividad se desarrolle de manera responsable y respetuosa con el medio ambiente, se promueve la educación ambiental y se establecen normas para minimizar el impacto humano en el entorno.

Además de su valor como destino turístico, la laguna de Gallocanta desempeña un papel crucial en la educación ambiental de las generaciones futuras. A través de programas educativos y actividades de divulgación, se sensibiliza a la población sobre la importancia de conservar los humedales y se fomenta el respeto hacia la naturaleza y la biodiversidad.

La laguna de Gallocanta es mucho más que un simple cuerpo de agua; es un santuario de biodiversidad que alberga una rica variedad de especies de aves y flora adaptada a su entorno único. Su conservación y gestión sostenible son fundamentales para garantizar su supervivencia y para seguir disfrutando de su belleza natural en las generaciones futuras. Como destino turístico y centro de educación ambiental, la laguna de Gallocanta sigue desempeñando un papel crucial en la conservación y apreciación de la naturaleza en España y más allá.