En las últimas semanas, el pasillo atlántico ha abierto sus puertas, dejando tras de sí registros de precipitación que superan los 800 litros por metro cuadrado en zonas del oeste de Galicia, el Sistema Central y la cara sur del Pirineo. Estos eventos meteorológicos han dado vida a los ríos, desatando un espectáculo natural en España.

Uno de los destinos recomendados es la famosa «Cola de Caballo» en el valle de Ordesa, donde las Arazas forman impresionantes saltos de agua. Las persistentes precipitaciones han provocado crecidas notables en los ríos del Pirineo oscense, dando lugar a estampas inolvidables para los amantes de la naturaleza.

Otro tesoro natural que resurge con fuerza es el Salto del Nervión, la caída de agua más grande de España con más de 220 metros de altura. Este solo espectáculo se activa tras lluvias y nevadas abundantes, ofreciendo vistas impresionantes desde el Monumento natural del Monte Santiago.

En el sur, cerca de Riópar (Albacete), el río Mundo nace bajo un imponente anfiteatro calizo. Las lluvias importantes desatan el fenómeno conocido como reventón, donde las cascadas de los «Chorros» pueden alcanzar hasta 80 kilómetros.

Este suceso, en el Nacimiento del Río Mundo, muestra la fuerza de la naturaleza multiplicando el caudal por mil.

Aunque las causas de estos eventos no están del todo claras, se sugiere que las precipitaciones, la presión y la temperatura desempeñan un papel crucial en estos fenómenos naturales que convierten a España en un destino imperdible para los amantes de la belleza natural.