Con la llegada del verano, muchos buscan escapar del bullicio de los destinos turísticos más populares en Europa. Las multitudes pueden restar encanto a las ansiadas vacaciones de verano, pero existen alternativas menos concurridas que ofrecen experiencias igualmente gratificantes. Desde las calles empedradas de Braga hasta los viñedos de Burdeos, Europa está repleta de lugares menos explorados que prometen tranquilidad y autenticidad.

BRAGA, PORTUGAL

Esta joya histórica, la ciudad más antigua de Portugal, ofrece una escapada tranquila y llena de encanto. Con su arquitectura medieval, deliciosos restaurantes de cocina portuguesa y monumentos históricos como la catedral más antigua del país, Braga invita a sumergirse en la cultura y la historia lusas. Además, el santuario de Bom Jesus do Monte ofrece vistas impresionantes y una experiencia espiritual única para los visitantes.

BURDEOS, FRANCIA

Con su combinación de excelente vino, arquitectura impresionante y una atmósfera relajada, Burdeos es el destino perfecto para disfrutar del verano francés lejos de las multitudes de París. Sus calles peatonales, monumentos históricos como el Grand Théâtre y la basílica de San Severino, y su proximidad al mar la convierten en un lugar ideal para explorar. Además, los alrededores de Burdeos ofrecen la oportunidad de visitar impresionantes châteaux y bodegas que bordean el río Gironda.

RÓTERDAM, PAÍSES BAJOS

Con un enfoque en el diseño sostenible y espacios verdes, Róterdam ha surgido como un destino vibrante y consciente. Sus políticas medioambientales y su compromiso con la reducción de emisiones hacen de esta antigua ciudad portuaria un lugar inspirador para unas vacaciones de verano. Los viajeros pueden disfrutar de paseos por sus calles peatonalizadas, admirar la arquitectura moderna y visitar atracciones como el Museo Boijmans Van Beuningen. Además, el río Maas ofrece oportunidades para relajarse junto al agua y disfrutar de las vistas de la ciudad.

BERGEN, NORUEGA

Con su arquitectura y su entorno natural, Bergen ofrece una experiencia única para los amantes de la naturaleza. Rodeada de montañas y fiordos, esta ciudad noruega es el punto de partida perfecto para explorar la belleza salvaje del país escandinavo. Los visitantes pueden recorrer las coloridas calles de Bergen, visitar lugares históricos como el muelle de Bryggen y embarcarse en emocionantes excursiones de senderismo por los alrededores.

Estos destinos alternativos en Europa ofrecen la oportunidad de disfrutar de unas vacaciones auténticas y tranquilas, lejos del bullicio de las multitudes. Desde la rica historia de Braga hasta la belleza natural de Bergen, cada uno de estos destinos promete una experiencia única y memorable para aquellos que buscan escapar del ajetreo del turismo masivo y sumergirse en la verdadera esencia de Europa.