Björn Costado de Hierro, un caudillo vikingo legendario cuya fama se ha difundido principalmente a través de la serie de televisión «Vikings«, emprendió una de las incursiones más ambiciosas de la era vikinga. Durante esta expedición, saqueó la Península Ibérica, planteando interrogantes sobre si, en algún momento de esta incursión, viajó a través de tierras aragonesas para llegar a Pamplona a través de Zaragoza.

En la serie «Vikings» y en muchas obras de drama histórico, se toman ciertas libertades creativas para mejorar la narrativa. Björn es presentado como el hijo de Ragnar Lodbrok y Lagertha en la serie, pero según el Ragnarssona þáttr (Relato de los hijos de Ragnar), Björn es en realidad hijo de Ragnar Lodbrok y la reina Aslaug.

Björn dejó el reino de su padre, Ragnar, siguiendo una costumbre danesa que buscaba evitar conflictos de autoridad con sus padres. Durante su exilio, se dedicó al saqueo de tierras cristianas, a menudo en compañía de otro destacado caudillo vikingo, Hastein, quien también se decía que era hijo de Ragnar. Juntos, utilizaron una flota de 62 drakkars (navíos vikingos) con aproximadamente 4.000 hombres para saquear el reino franco (actual Francia).

La cuestión sobre si los vikingos, en particular Björn Costado de Hierro, remontaron el río Ebro o desembarcaron en la costa norte de España en su camino hacia Pamplona es un tema histórico interesante y debatido en la historia de Zaragoza y Aragón, como detallan en la web Historia de Aragón.

Algunos argumentan que los vikingos podrían haber remontado el río Ebro en sus drakkars, ya que estos barcos eran lo suficientemente ligeros como para ser transportados fuera del agua en caso de encontrar un tramo fluvial no navegable. Sin embargo, esta teoría carece de evidencia sólida de fuentes primarias que respalden su paso por Zaragoza.

Aquellos que defienden que no saquearon Zaragoza sugieren que los Banu Qasi, quienes controlaban la ciudad en ese momento, podrían haber llegado a un acuerdo con los vikingos para evitar el saqueo de Zaragoza o que los vikingos consideraron que la ciudad era difícil de asaltar, dado su historial de resistencia incluso contra Carlomagno en el pasado.

Además, se señala que no hay registros de saqueos vikingos en otras localidades ribereñas del Ebro, como Tortosa, Mequinenza o Tudela, lo que podría debilitar la teoría de su remontada del río.

Por otro lado, existen fuentes primarias que indican que los vikingos desembarcaron en la costa norte de España en su ruta hacia Pamplona. Los Anales de Ibn Hayan mencionan que los vikingos que llegaron a la costa occidental de España hicieron prisionero al rey García Íñiguez de Pamplona, quien luego fue rescatado por un mercader judío. Según esta crónica, el mercader judío pagó el rescate con la expectativa de recibir intereses, pero los pamploneses no devolvieron la totalidad del rescate más los intereses.

En última instancia, la pregunta sobre la ruta exacta de los vikingos en su incursión a Pamplona sigue siendo objeto de debate y especulación, y la falta de evidencia sólida de fuentes primarias hace que sea difícil llegar a una conclusión definitiva.

LAS INCURSIONES DE LOS VIKINGOS Y DE BJÖRN

Existen registros históricos que respaldan la presencia de Björn en Francia. Según las «Annales Bertiniani», crónica franca del siglo IX, un caudillo llamado Berno (una transliteración de Björn) atacó la Francia occidental en el año 855. Björn continuó su incursión hacia Al-Ándalus, donde asedió y saqueó Algeciras. Los historiadores árabes, como Ibn-Jaldun e Ibn Idhari, documentaron estos eventos y proporcionaron una fecha aproximada de 859-860 d.C. para los saqueos vikingos en Al-Ándalus.

Después de cruzar el estrecho de Gibraltar, los vikingos saquearon Nakur, una ciudad cercana a Melilla, donde capturaron y vendieron esclavos negros en Irlanda. Luego regresaron a la Península Ibérica, saqueando la costa este de España y estableciendo un campamento en una isla del delta del Ródano para el invierno.

En el año 860, los vikingos saquearon la ciudad italiana de Luni. Utilizaron un astuto plan en el que Björn fingió su muerte y solicitó una ceremonia cristiana en la capilla de Luni. Una vez dentro de la iglesia, Björn y los vikingos saquearon la ciudad.

Según relatos históricos, después de estos eventos en el Mediterráneo, los vikingos intentaron regresar a casa cruzando el estrecho de Gibraltar. Sin embargo, fueron interceptados y derrotados por la flota andalusí, perdiendo varios barcos en el proceso.