Es entre 40 y 100 veces más efectivo que el agua, es ecológico, orgánico, no corrosivo e inocuo para las personas, animales y plantas. Su patente es aragonesa, y la empresa que lo distribuye, también. Sin embargo, Ecofire, el único producto que podría acabar con la propagación de los incendios, sigue siendo más conocido internacionalmente que en el lugar que lo vio nacer.

Sus capacidades son extraordinarias y no hay otro producto conocido que cuente con estas ventajas, ya que no solo extingue los incendios, sino que otra de sus virtudes es que es capaz de prevenirlos. «Donde lo apliques conviertes en ignífugo esa superficie, sea lo que sea», explica Ibán Moreno, CEO de Simonrack, empresa distribuidora de Ecofire. Esta ventaja sería clave a la hora de contener los incendios, ya que al rociar el producto sobre una superficie no permitiría que se siguiera extendiendo.

Desgraciadamente, el humo es una de las principales causas de víctimas en estos accidentes, ya que la inhalación de gases tóxicos durante un tiempo prolongado es letal. El efecto que consigue el producto es encapsular el humo evitando la emisión de gases tóxicos, con lo que «evitas el riesgo para el ser humano y evitas la propagación del fuego», continúa Moreno.

POR QUÉ NO SE HA IMPLANTADO

Ante tanta evidencia y tantas ventajas que ofrece el producto a la hora de solucionar esta problemática, surge la evidente pregunta: ¿Por qué no lo usan ya los bomberos? Ibán Moreno responde: «Algo tan novedoso, tan diferente y que unifica tanta innovación y tantas ventajas, a veces, es difícil de creer».

Ecofire ya es una realidad que ha llegado a muchas empresas que sí han creído, tras muchas pruebas y evidencias, en el invento de Sallent. Iberdrola es una muestra de ello, ya que han aprobado y homologado el producto para apagar baterías eléctricas. Otras muchas empresas internacionales, como la potente Arauco, empresa chilena dedicada a productos forestales, han apostado por este producto aragonés.

¿Y en Aragón? Moreno asegura que ya han mantenido reuniones con el Gobierno de Azcón, con quienes ha conseguido acordar una prueba en el campo, que previsiblemente se llevará a cabo este mes de marzo. Esta prueba llegará en un momento crucial en el que el Gobierno de Aragón y DGA han mostrado su preocupación tras el terrible incendio de Valencia y han propuesto iniciar una investigación sobre la composición de los inmuebles.

MÁS EFECTIVO, Y MÁS ECONÓMICO

En un momento en el que no podemos presumir de que el agua sobre, Ecofire presenta otra ventaja al respecto y es que es «infinitamente más barato que el agua». La relación de lo que se necesita de agua respecto a Ecofire es de 1:100 o 1:50 dependiendo de las circunstancias.

Con el foco puesto lograr implantar el producto en Aragón, Ibán Moreno se muestra esperanzado y cree que es «una buena oportunidad para Aragón para poner en el mapa el carácter que tenemos los aragoneses y nuestra sensibilidad». Por ello los próximos pasos son «definitivamente implantarlo en Aragón y de Aragón salir al mundo, y que no tenga que ser al revés», concluye Moreno.