Han pasado ya 9 meses desde que tomara posesión del cargo y ella describe este tiempo como “un reto apasionante”. La nueva alcaldesa de Huesca, Lorena Orduna, en esta entrevista con HOY ARAGÓN, reconoce que “ha sido intenso”. Se ha tenido que enfrentar a un campo de fútbol sin licencia, unos fondos europeos perdidos, y una ciudad “sin rumbo ni proyecto” que ahora intenta pilotar.

PREGUNTA. Usted viene de la empresa privada y hasta ahora no tenía experiencia política, ¿qué tal le está resultando la experiencia?

RESPUESTA. Llevo nueve meses gobernando y es como si llevara tres años. Hay tantos problemas que solucionar y tantos retos por cumplir para la ciudad que mis días parecen semanas y mis semanas meses. Pero yo estaba acostumbrada a gestionar y a hacer cosas complicadas, así que en ese sentido resulta sencillo.

Sencillo, pero ha tenido que apagar algún fuego nada más llegar…

Fue nuestra primera sorpresa al llegar, comprobar que El Alcoraz carecía de licencia ambiental después de 5 años de haber tenido una reforma estructural. El cierre del campo al público fue una de esas decisiones duras que tienes que tomar pero en solo 4 meses hemos conseguido el informe que entendemos saldrá favorable.

Y del Alcoraz pasamos a una Lola índigo que os abandonó

Ya, ya. Y aquello fue otra crisis de estado, madre mía… No se puede alegar unas causas técnicas de una pantalla para no cantar y dejar a casi 10.000 familias allí sin un espectáculo que el Ayuntamiento de Huesca había proporcionado. Pero este episodio todavía no se ha cerrado, ya veremos a ver qué pasa.

Las Harineras, ¿avanzan finamente a pesar de este último recurso que han presentado?

Al parecer la Junta de Compensación de las Harineras había elevado de una manera muy restrictiva el órgano de contratación y se ha entendido que podía haber una indefensión al resto de licitadores beneficiado más a los oscenses. Pero va a ser una subsanación muy rápida y en poco tiempo podrá salir de nuevo a licitación. Ahora tenemos que solucionarlo lo antes posible para que esas primeras 100 primeras viviendas puedan ser una realidad en dos años.

Usted especialista en amianto y diagnóstico diferencial para industria y edificaciones, una industria que ha estado siempre marcada por hombres, ¿ha sentido que pudieran tenerle en menos consideración?  

Al principio, cuando era joven, sí. Es un ámbito muy masculinizado, básicamente, en todos los puestos de trabajo. Pero luego mi puesto de trabajo cambió y con todo el conocimiento que yo tenía de la materia contaban conmigo en los principales foros, no solamente de ámbito de construcción local, sino también internacional. Hay muy poca gente capaz de identificar y diagnosticar esas patologías en los edificios.

Y esto supongo que también lo estará aplicando en Huesca…

Bueno, todavía no se me ha olvidado, por supuesto.  Y tengo este “defecto”. De hecho, estamos viendo muchos edificios con problemas, no solo de amianto, de otras cosas.

Por ejemplo, el del ambulatorio del Santo Grial. ¿Qué problemas tiene?

Tiene tuberías de plomo, un material que contienen residuos peligrosos por la erosión del tiempo, y que puede resultar tóxico e insalubre para la ingesta humana. Una persona que viva en una edificación con este tipo de tubería puede desarrollar una intoxicación o un proceso canceroso.

Por el momento tanto pacientes como facultativos han sido derivados a los Olivos…

Es una decisión política, como todo. Pero yo creo que lo más importante es salvaguardar la salud íntegra de esos trabajadores y de los usuarios, de esos vecinos.

¿Estará paralizado durante mucho tiempo?

Podrían pasar un par de meses, también para arreglar otros problemas que tenía, como la antigüedad de la caldera o la accesibilidad.

Otro edificio que también habéis descubierto que estaba en malas condiciones ha sido el del Seminario. ¿Qué pasa en este caso?

Ay, el Seminario… Lleva judicializado cinco años por un proyecto del anterior equipo de gobierno en el que se iban a “liberar espacios”. Como ves, nada más empezar a gobernar hemos ido solucionando lío tras lío. Un edificio de esas características sin un mantenimiento ni consolidación puede colapsar. Y ahora nos toca otra vez a nosotros liderar la solución para un problema que dejó el equipo de gobierno anterior. Los 14 fondos europeos destinados para su arreglo se perdieron y nosotros no lo podemos acometer solos.

¿Y qué pasa con el resto de fondos europeos que sí van a llegar a Huesca?

Bueno,… otra maravilla… Cuando llegamos al Ayuntamiento de Huesca detectamos que había medio funcionario ocupándose de los fondos europeos y una empresa externa (que ni si quiera era de Huesca) la que decidía qué fondos se pedían, pero sin realizar ningún diagnóstico la ciudad. Pero el problema más importante es que tampoco se ha estudiado si el Ayuntamiento tiene capacidad económica para afrontar esos 12 millones de euros. Con esto ha habido falta de trabajo, falta de gestión y falta de proyecto. Lo de siempre con el equipo de gobierno anterior. Una ciudad sin rumbo.

Hablemos del AVE: hemos conseguido Córdoba y Sevilla pero los oscenses se siguen quejando de la falta de frecuencias

A los 10 días de ser alcaldesa ya mandé la primera carta preguntado por las frecuencias que se habían perdido en la pandemia. Y hasta ahora he llegado a escribir tres cartas. Y no he recibido respuesta. Eso puedes ponerlo.

¿Y qué hacemos con el aeropuerto?

Tengo pendiente una conversación con el director general de transporte. Esto es otro reto en el que estamos trabajando, y convertirlo en una escuela de pilotos podría ser una de las soluciones.