Rosa Serrano se presenta en las elecciones europeas del 9 de junio con una trayectoria que la ha consolidado como una figura destacada en el PSOE aragonés en los últimos años, tanto desde su ocupación en Huesca como a nivel nacional, como senadora y su dedicación en la Delegación del Gobierno en Aragón.

En palabras de Serrano, su candidatura a las elecciones europeas no solo busca llevar la voz de Aragón a Bruselas, sino también reafirmar su compromiso con las políticas progresistas que promueve el Partido Socialista.

Sin embargo, la inclusión de Serrano en la lista de candidatos del PSOE no ha estado exenta de controversia. En un movimiento que generó -y genera- un considerable revuelo dentro del partido, Ferraz decidió colocar a Serrano en el puesto 18 de la lista, desplazando a la europarlamentaria Isabel García.

Esta situación llevó -incluso- a que el actual líder aragonés del PSOE, Javier Lambán, tildara de «humillación» la decisión de Sánchez por imponer a su candidata y obviar al 90% del PSOE-Aragón que votó a otros candidatos.

Pero, a pesar de las críticas y el descontento dentro del partido, Rosa Serrano sigue adelante con decisión hacia las elecciones europeas. Comprometida con representar a Aragón en la capital europea, Serrano promueve la lucha contra el «fango» de los pactos de la derecha.

PREGUNTA. ¿Cómo planea representar los intereses específicos de Aragón en el Parlamento Europeo?

RESPUESTA. Vamos con el objetivo de seguir, mejorar y afianzar el trabajo que se ha realizado en estos últimos años por parte del grupo socialista. Es cierto que tenemos que abordar varios mensajes que nos trasladan desde el territorio. Como son el demográfico, las infraestructuras o la agricultura que creo que es un sector estratégico para nosotros con el cual tenemos que trabajar por esas mejoras que están reivindicando. Iremos en esa línea, continuando, de alguna manera, el trabajo que anteriormente han hecho tanto la compañera Inés Ayala como Isabel García. 

La agricultura juega un papel fundamental en Aragón, ¿qué cambios en la PAC serían beneficiosos para los agricultores y ganaderos aragoneses? 

Tanto la agricultura como la ganadería, además de velar por la rentabilidad de su trabajo, también deben velar por un trabajo sostenible y respetuoso con el medio ambiente porque se les exige. Por lo que habrá que darles facilidades para que lo puedan seguir haciendo. 

Hemos escuchado los problemas del sector que debemos abordar como los precios justos, la política comercial o, sobre todo, lo que ha supuesto también la seguridad de la energía. Muchas de esas reivindicaciones ya se han tenido en cuenta, de ahí la flexibilidad de la carga administrativa que se ha solucionado, pero podemos seguir mejorando todavía. Aunque es verdad que en el campo hay otro problema que es que las derechas están usando ese sufrimiento del sector, que para nosotros estratégico. 

No pueden decir que el problema de la agricultura son los ODS que plantean beneficios para el campo porque creemos desde el Partido Socialista que el futuro de la agricultura y de la ganadería no será posible si no abordamos las políticas del cambio climático del que hoy ya están pagando sus consecuencias.

¿Y respecto al relevo generacional?

Del relevo generacional se habla mucho y me consta que se ha trabajado desde el Ministerio de Agricultura. Lo que tenemos que hacer entre otras cosas es dar más facilidad a esos jóvenes que se incorporan, que ya hay medidas establecidas, y hacer el sector más estable para que los jóvenes se decidan a quedarse en sus pueblos y a trabajar en un sector estratégico como es la agricultura.  

¿Cómo cree que se pueden aprovechar mejor los fondos europeos para impulsar proyectos de infraestructuras?  

Aragón en infraestructuras ferroviarias ha tenido una inyección de la Unión Europea de más de 230 millones de euros. Es cierto que el Corredor Cantábrico-Mediterráneo es el que más presupuesto ha tenido, pero junto con el Canfranc son dos de los avances más importantes.

Seguiremos apostando por esa línea porque creo que también es una reivindicación que desde Aragón se estaba haciendo y es un paso importante para seguir realizando.  

¿Cómo se pueden aprovechar los fondos europeos para mejorar el acceso a la vivienda en Aragón?  

El Parlamento Europeo aprobó un informe sobre el acceso a la vivienda digna y asequible. Creemos que es el momento de la Europa de la vivienda y por eso se abordó la estrategia europea de vivienda y una estrategia europea de rehabilitación y de renovación urbana. 

Uno de los ejemplos es lo que Zaragoza ha puesto en marcha, por un lado, un proyecto de vivienda de alquiler dotado con más de 16 millones de euros y, por otro, un proyecto de rehabilitación residencial que ese es casi 7 millones de euros.  

Al igual que en Zaragoza existen hasta 800 viviendas en el resto de Aragón que cumplirán los requisitos que la Unión Europea requiere. 

¿Qué estrategias tiene el PSOE para combatir el desempleo juvenil en Aragón y crear nuevas oportunidades laborales a través de programas europeos?  

La juventud de toda Europa ha sufrido el impacto de las diversas crisis que hemos tenido, han perdido oportunidades de educación, de empleo e, incluso, de desarrollo personal. Pensamos que si se invierte en la juventud del presente se está contribuyendo a crear un mercado laboral bastante más competitivo e inclusivo para el futuro. 

Hemos conseguido que se ponga en marcha una ley europea para que las prácticas del mercado laboral abierto sean consideradas como trabajo y así que los becarios y becarias sean tratados como trabajadores. Esto se realiza a través de los fondos europeos que se derivan directamente hacia el Ministerio o las comunidades autónomas que despliegan los programas y planes para los sectores estratégicos como es la juventud.  

¿Qué iniciativas defiende para mejorar la conectividad y el transporte en Aragón, tanto a nivel regional como europeo?  

Las infraestructuras para nuestro territorio son muy importantes. Creamos economía e industria si tenemos unas infraestructuras en condiciones. El sector económico requiere que Aragón tenga esas infraestructuras para poder estar conectada con plateas, polígonos, en definitiva, con el resto del territorio tanto a nivel nacional como europeo. 

Llega como candidata del PSOE a las elecciones europeas tras el veto de Sánchez y Ferraz a la candidata elegida por la militancia. ¿Cree que le va a pesar electoralmente?  

Hablar de veto me parece un poco duro. Desde un inicio hemos dicho que había sido un proceso limpio, al final respecto a la manera de proceder, es el Comité Federal de Listas quien organiza o planifica esa lista definitiva. Veto no se le ha puesto a nadie, creo que se agradece mucho su trabajo, ese trabajo que tanto Isabel como Inés han realizado.  

⁠¿Cuál es el clima del PSOE aragonés entre el sector Pilar Alegría y el sector Javier Lambán?  

De puertas a unas elecciones el PSOE Aragón está unido y saldrá para conseguir la mayoría de votos que nos harán poder volver a ganar las elecciones.   

El auge de la extrema derecha y la caída de la socialdemocracia se ve en toda Europa. ¿A qué cree que se debe la pérdida de confianza en el socialismo europeo?  

Hablo de España, pero imagino que en más países también sucederá, aquí otros están haciendo una coacción al Gobierno central, hay una derecha reaccionaria totalmente, creo que el Partido Popular chapotea en el fango constantemente con Vox.  

Los pactos reaccionarios, los pactos de la vergüenza entre el PP y Vox que sufrimos en Aragón creo que se pueden hacer extensivos también en Europa y eso hace que la sociedad vea ese reflejo y permita que cada vez la crispación sea más latente también en la ciudadanía.  

Entonces, igual que Aragón se refleja en la situación que existe a nivel nacional en España, ¿ocurre lo mismo a nivel europeo? 

Está claro que hay una derecha reaccionaria a nivel mundial. Meter a la extrema derecha en los gobiernos tiene unas consecuencias que ya no se trata de discursos que incitan al odio, que también, sino que pasan a los hechos de quitar derechos y de quitar progreso.  

Lo que está claro es que la extrema derecha quiere enfrentar a las personas mientras que nosotros queremos unirlas. Nuestra familia política europea tiene una clara línea roja: nunca colaboraremos ni formaremos coaliciones con la extrema derecha.