Estudiantes de la Universidad de Zaragoza han iniciado una acampada indefinida en el campus de San Francisco de la capital aragonesa, en solidaridad con el pueblo palestino. Prevén prolongar esta protesta hasta que se cumplan sus demandas de que la institución académica corte sus lazos con Israel.

La noche del jueves, alrededor de cincuenta personas durmieron encerradas en el edificio Interfacultades de este campus, tras una concentración convocada por la Asamblea Popular Universidad de Zaragoza. Esta acción es un paso más en una movilización a la que invitan a unirse a toda la ciudadanía, según explicó el portavoz del colectivo, Iñaki García, a la agencia EFE.

El campus aragonés se une así al movimiento universitario en contra del «genocidio israelí», iniciado en Estados Unidos y replicado en varios países europeos y otras universidades españolas en los últimos días.

En Zaragoza se llevarán a cabo asambleas diarias, según García. La primera tuvo lugar este viernes a las 19:30 para analizar la evolución del conflicto y las medidas adoptadas. Consideran necesario aumentar la presión para que se cumplan sus demandas.

Estas demandas incluyen que las instituciones universitarias se posicionen en el conflicto y pongan fin a los acuerdos y lazos diplomáticos y comerciales con empresas e instituciones vinculadas con Israel.

El campamento en el campus de San Francisco se ha instalado este viernes y aunque el número exacto de participantes es desconocido, García señaló que hay más personas que ayer han manifestado su intención de unirse a la iniciativa y tienen tiendas de campaña para hacerlo.

El jueves, la Junta Rectora de la Conferencia de Rectores y Rectoras de las Universidades Españolas (CRUE) reafirmó su compromiso con la defensa del derecho internacional humanitario y se mostró dispuesta a revisar y, en su caso, suspender acuerdos de colaboración con centros de investigación y universitarios de Israel que no hayan expresado un firme compromiso con la paz.