Aragón contará próximamente con 49 kilómetros más de vía verde que discurrirán por el Campo de Belchite. El proyecto cuenta con una inversión de 2,2 millones de euros y consistirá en transformar en un nuevo recurso turístico la antigua línea ferroviaria Zaragoza-Utrillas.

El proyecto va a servir, al mismo tiempo, para recuperar parte del patrimonio industrial asociado al ferrocarril, como son tres antiguas estaciones. Además, se habilita el recorrido para la práctica deportiva, especialmente la cicloturista, y otras actividades vinculadas al turismo activo.

En concreto, “Vía Verde en la Comarca Campo de Belchite: el tren de la sostenibilidad” va a suponer la mejora y adaptación de las estaciones de tren de Azuara, Lécera y La Puebla de Albortón. En este último punto habrá un centro de interpretación del paisaje de la comarca, así como de sus particularidades culturales.

De este modo, la Vía Verde servirá como hilo conductor de enclaves turísticos tan consolidados como el Pueblo Viejo de Belchite, la presa romana de Almonacid de la Cuba, la Ruta del Hielo, la Casa Natal de Francisco de Goya en Fuendetodos o los parajes naturales de La Foz de Zafrané o la Hoz Mayor.

El recorrido de esta vía natural discurrirá en paralelo al antiguo eje ferroviario Zaragoza-Utrillas, con 49 kilómetros que se extenderán dentro de los límites del Campo de Belchite. “La actividad del tren cesó en 1966 y, desde entonces, todas las infraestructuras antaño necesarias para el transporte de mercancías y viajeros quedaron obsoletas y abandonadas», ha indicado Carmelo Pérez, presidente de la comarca, durante la presentación del proyecto.

«Nuestro propósito – continúa – es revalorizar las instalaciones y dar a conocer la historia de esta importante línea, que permitió durante más de 60 años trasladar a la ciudad el carbón extraído en las Cuencas Mineras”.

El trazado, además, va a ser objeto de una reforestación y restauración botánica que lo conviertan en un “corredor verde”, cuyo objetivo es paliar los efectos del cambio climático en el territorio y hacerlo óptimo para su uso como ruta ciclo-turista y senderista.

Contará, asimismo, con iluminación nocturna sostenible y autosuficiente, compatible con los ecosistemas, con pasarelas y señalética para indicar el sentido del trayecto. También se van a reconstruir dos antiguos viaductos.

La implementación de este proyecto es posible gracias a la colaboración de los Ayuntamientos locales con la comarca Campo de Belchite y el Gobierno autonómico, a través de la asignación de los fondos europeos Next Generation para el Programa de Planes de Sostenibilidad Turística en Destino (PSTD).

Aragón cuenta actualmente con unos 250 kilómetros de itinerarios acondicionados como Vías Verdes. La de Ojos Negros es la más larga, seguida de la de Valde Zafán, ambas en la provincia de Teruel. En Huesca está la de Canfranero, un tramo de menos de cinco kilómetros entre Huesca y Alerre.

Con el nuevo proyecto del Campo de Belchite, la oferta de vías verdes crece en la provincia de Zaragoza, donde ya hay recorridos de este tipo en Tarazona, Borja, Calatayud o Daroca.