La subida de los tipos de interés anunciados este mes por el Banco Central Europeo hasta el 4,5%, cifra que no se alcanzaba en las dos últimas décadas, ha supuesto que muchos ciudadanos se planteen la cuestión de si es un buen momento para firmar una hipoteca.

Esta situación, que según la mayor parte de economistas es transitoria y está vinculada al control de la inflación, no está frenando la construcción de obra nueva en las principales ciudades.

Entre otros motivos, se encuentra el hecho de que capitales como Zaragoza han reducido en los últimos años de forma significativa el número de viviendas vacías, hasta el punto de que, literalmente, faltan casas, en gran medida debido al éxodo de los núcleos rurales a las grandes urbes.

Por su parte, el impacto de la subida del precio del dinero en las hipotecas se está produciendo sólo en aquellas de tipo variable. Y, además, no en todas ellas. Para aquellos que cuentan con hipotecas en vigor, la Fundación de las Cajas de Ahorros (Funcas) ha señalado que aquellos que actualizan sus hipotecas dos veces al año podrán apreciar una baja en sus cuotas mensuales, concretamente en enero de 2024, mientras los que la revisan una vez lo harán en abril de 2024.

Respecto a en qué momento el Banco Central Europeo volverá a la senda de tipos de interés bajos, todo depende de dos variables.

En primer lugar, que esta medida para ralentizar la economía surta el efecto deseado y la inflación en la Zona Euro regrese a los niveles saludables por debajo del 2%. No obstante, mantener los tipos tan elevados durante un tiempo prolongado puede suponer otros peligros para economías locales más débiles, como posibles recesiones.

Por este motivo, la mayoría de estudios manejan previsiones a corto plazo para el descenso de los tipos de interés y coinciden en señalar mediados de 2024 para que vuelvan a bajar progresivamente a los niveles habituales. En este sentido, Funcas estima que el Euribor a un año superaría el 4% a finales de 2023 y descendería posteriormente hasta situarse en el entorno por del 3,5% a finales de 2024.

Estas previsiones han sido confirmadas por el propio vicepresidente del BCE, Luís de Guindos, que ha señalado que no descarta que las tasas rectoras empiecen a recortarse a mediados de 2024 y, en paralelo, el Euribor baje.

HIPOTECAS A TIPO FIJO E HIPOTECAS MIXTAS

Esta subida de tipos de interés sólo tiene impacto en las hipotecas a tipo variable, por lo que los ciudadanos que cuenten a día de hoy con hipotecas a tipo fijo no van a ver repercutido ningún cambio. La alternativa actual para las hipotecas de nueva constitución que está teniendo más éxito es la de tipo mixto.

Una de las más relevantes es la que Ibercaja anunció el pasado mes de mayo, que mejora los tramos fijos a cinco y diez años para operaciones de más de 200.000 euros. Actualmente, la hipoteca ‘Vamos Mixta’ de Ibercaja se dirige a importes desde 100.000 euros, siempre que no se supere el 80% del valor de tasación, con un plazo de 25 años.

Con este tipo de fórmulas mixtas, se puede «salvar» este periodo de inestabilidad pactando una cuota fija durante un primer tramo, para regresar posteriormente al modo variable cuando la situación esté plenamente normalizada.