Fue una de las grandes consecuencias de la burbuja inmobiliaria de 2009, pero en lo que respecta a las grandes ciudades, entre las que se encuentra Zaragoza, el problema de las viviendas vacías se ha reducido de forma notable. En el caso de la capital aragonesa, esto ha permitido que se tomen decisiones precisamente para aumentar el parque residencial, como el hecho de poder habilitar locales y plantas bajas como vivienda.

Según el estudio ‘Situación de la vivienda vacía en España, realizado por Tinsa Research, destaca que las seis principales capitales del país, entre ellas Zaragoza, han logrado reducir el número de viviendas vacías en un 40% en 20 años. Este fenómeno es menos acusado en el resto de capitales provinciales, que en su conjunto registran un descenso de pisos vacíos del 32%.

Por el contrario, en el conjunto del país, la vivienda vacía ha seguido aumentando, concretamente un 24% entre 2001 y 2021. Las zonas en las que se detecta un mayor porcentaje de viviendas vacías es en la costa, que aglutina hasta un 51% de todos los inmuebles sin habitar de España.

Por su parte, también se detecta que en estos 20 años se ha acrecentado el éxodo desde el ámbito rural a las grandes ciudades. La despoblación, especialmente en el interior y el nordeste peninsular, ha provocado que aumente el número de viviendas vacías en estas zonas.

CASI 130.000 VIVIENDAS VACÍAS EN ARAGÓN

En el caso de Aragón, existían un total de 85.346 inmuebles vacíos en 2001, aumentando en 2021 hasta los 129.870, es decir, un 52% más. El caso es diametralmente opuesto en Zaragoza capital que, junto a Madrid, Barcelona, Valencia, Sevilla y Málaga ha reducido un 40% las viviendas sin habitar.

Y eso, además, aumentándose el parque residencial. En 2001, la capital aragonesa contaba con un total de 283.649 viviendas, subiendo en 2021 a un total de 338.961, es decir, un 19,5% más.

En todo caso, el estudio señala que la mayor parte de viviendas vacías en estas grandes capitales responde a algún tipo de motivo, ya sea por condiciones de inhabitabilidad, procesos jurídicos asociados o, simplemente, porque sus propietarios han decidido mantenerlas fuera del mercado. Según el estudio, desbloquear esta situación en las grandes ciudades podría ser una solución a corto plazo a la construcción de nuevas zonas residenciales, que debe seguir aumentando.