Cada vez se busca más un lugar donde veranear que esté alejado de las grandes aglomeraciones o playas masificadas, pero que también sean lugares familiares para hacer actividades al aire libre y que tengan una buena gastronomía. Este es el ideal de muchos que quieren veranear en España y no tener que pasar sus vacaciones en el mismo lugar donde lo hacen otros tantas decenas de miles de personas. Ejemplos en la costa española hay cientos: desde las masificadas playas de Peñiscola, Salou o Zarauz; a la altísima demanda de público extranjero en la costa almeriense y malagueña.
¿Es posible encontrar un lugar de veraneo donde comprar una vivienda de obra nueva y además tener la suerte de ser un pueblo tranquilo, con planes familiares, naturaleza y buena gastronomía? Sí, es posible poder disfrutar de playas menos concurridas, sin multitudes, y de una atmósfera más auténtica y tradicional. Esto es especialmente atractivo para las familias que buscan un ambiente seguro y amigable para sus hijos. Además, al no estar masificados, es más probable que puedas disfrutar de estos planes familiares sin aglomeraciones y con una mayor sensación de intimidad.
Y aquí te recomendamos tres lugares que aúnan todas estas cualidades.
ALCOCÉBER, CASTELLÓN
Ubicado en la costa mediterránea entre Tarragona y Castellón, Alcocéber se ha convertido en el pueblo de moda para aquellos que buscan un destino tranquilo con planes familiares, playas sin masificar y una experiencia gastronómica excepcional. Este encantador rincón costero ofrece una combinación perfecta de belleza natural, actividades familiares y una oferta culinaria de primer nivel.
Alcocéber es famoso por sus hermosas playas, que se caracterizan por ser menos concurridas que otras en la costa mediterránea. Aquí encontrarás amplios tramos de arena dorada y aguas cristalinas donde podrás relajarte y disfrutar del sol en un ambiente más tranquilo. Las playas de La Romana y la Playa del Moro son dos opciones populares para disfrutar de la tranquilidad y la belleza del entorno marino.
Además, una de las joyas de Alcocéber es la Sierra de Irta, una reserva natural que alberga impresionantes calas y paisajes que te transportan a las Islas Baleares. Puedes explorar senderos junto al mar que serpentean por la sierra y descubre calas escondidas de aguas turquesas y acantilados imponentes. Estos rincones paradisíacos son perfectos para los amantes de la naturaleza y aquellos que buscan un entorno más aislado y salvaje.
Si por algo destaca Alcocéber es por su oferta gastronómica de primer nivel. El restaurante Atalaya, galardonado con una estrella Michelin, deleitará a los comensales con su innovadora cocina de autor basada en productos locales de alta calidad. Can Roig es otro destacado, conocido por sus exquisitos platos de pescado y marisco fresco, mientras que El Pinar ofrece una experiencia culinaria tradicional con toques creativos.
El paseo marítimo y la zona del puerto deportivo ofrecen un ambiente animado y acogedor, con una variedad de tiendas, heladerías y restaurantes que atraen tanto a niños como a adultos. Sin masificaciones, ni grandes eventos, suele ser un lugar tranquilo donde pasear y ver los yates y barcos de más de 17 metros de eslora que ahí atracan.
FUENTERRABÍA, GUIPÚZCOA
Fuenterrabía, también conocida como Hondarribia en euskera, es una hermosa ciudad costera ubicada en la provincia de Guipúzcoa, en el País Vasco. Con su encanto histórico, su atractiva vida culinaria, sus impresionantes playas y su rica historia, Fuenterrabía ofrece una experiencia completa para los visitantes.
Conocida por su increíble escena culinaria, que abarca desde la cocina vasca tradicional hasta la innovadora cocina de autor. En el Casco Viejo, el casco antiguo de la ciudad, encontrarás una amplia variedad de bares de pintxos, donde podrás disfrutar de las deliciosas creaciones culinarias en miniatura que son emblemáticas de la región. Recorre las estrechas calles y prueba pintxos con mariscos frescos, txakoli (vino blanco local) y otras delicias gastronómicas.
Si buscas una experiencia gastronómica más formal, Fuenterrabía cuenta con varios restaurantes de alta calidad que ofrecen platos tradicionales e innovadores. Prueba el famoso rodaballo a la parrilla o la txangurro (centollo relleno) en uno de los establecimientos locales para saborear la esencia de la cocina vasca.
El Monte Jaizkibel es un lugar ideal para los amantes del senderismo, con una variedad de rutas que ofrecen vistas panorámicas de la costa y el paisaje circundante. Además, el puerto deportivo de Fuenterrabía es un punto de partida perfecto para actividades acuáticas. Puedes alquilar un barco o un kayak para explorar la bahía y disfrutar de la vista de la ciudad desde el agua. También puedes unirte a excursiones en barco para disfrutar de la pesca deportiva o para avistar delfines y otras especies marinas.
Por último, Fuenterrabía cuenta con playas espectaculares que ofrecen un ambiente relajado y hermosas vistas al mar. La playa de Hondarribia es una de las más populares, con su arena dorada y aguas tranquilas. Aquí puedes tomar el sol, dar un refrescante baño o simplemente relajarte con un buen libro mientras escuchas las olas rompiendo suavemente en la orilla.
Además, el Castillo de Carlos V, situado en la parte alta de la ciudad, es otro símbolo de su pasado histórico. Construido en el siglo X, el castillo ofrece una vista panorámica de Fuenterrabía y del estuario del río Bidasoa.
COMARRUGA, TARRAGONA
Comarruga, un pintoresco pueblo costero situado en la provincia de Tarragona, España, es un destino ideal para aquellos que buscan un lugar tranquilo y familiar para disfrutar de unas vacaciones de verano. Con sus playas vírgenes, su ambiente acogedor y una amplia oferta de actividades para toda la familia, Comarruga ha ganado popularidad como un destino vacacional con un encanto especial.
Una de las principales razones para elegir Comarruga como destino de veraneo es su maravillosa costa, con playas vírgenes y poco masificadas. Aquí encontrarás extensas franjas de arena dorada bañadas por aguas cristalinas. Las playas de Comarruga son ideales para relajarse, tomar el sol y disfrutar del mar en un ambiente tranquilo y familiar. Además, muchas de las playas cuentan con servicios y comodidades, como alquiler de tumbonas y sombrillas, así como áreas de juego para niños.