Lo han llamado el «túnel fantasma» y así seguirá por bastante tiempo. El túnel de la A-68, que conecta El Portillo con la estación de Delicias y que no está equipado para su uso, no entra en las actuaciones de urbanización que se van a llevar a cabo en este área, donde sobresale un enorme parque público de 42.000 metros cuadrados.

La buena sintonía entre Ayuntamiento de Zaragoza, Gobierno de Aragón y ADIF ha hecho posible que esos suelos, que suponían una enorme cicatriz en la capital aragonesa que se ha prolongado durante décadas, por fin vayan a ser urbanizados. Sin embargo, el túnel ha quedado por ahora fuera de cualquier proyecto, dado que su adecuación supondría una inversión de, al menos, 23 millones de euros.

Como explican fuentes de Urbanismo del Ayuntamiento de Zaragoza, esa cantidad es meramente una estimación y es ahora cuando se va a estudiar si es realista. Es decir, podría ser más. Zaragoza Alta Velocidad ha acordado revisarlo y calcular, además, lo que supondría su mantenimiento anual. No obstante, y teniendo en cuenta que el montante será en todo caso elevado, no se ve a día de hoy factible ni prioritaria su adecuación, y eso por parte de ninguno de los socios.

UN TÚNEL VACÍO Y SIN EQUIPAR

Semejante desembolso, que ahora está previsto que se cifre con mayor precisión, implicaría la instalación de equipos de ventilación, luz, sistema anti incendios, redes de telecomunicaciones, señalización viaria, semáforos, etc. Actualmente, la infraestructura carece de todo ello y es, pura y llanamente, un túnel sin posibilidad de uso para ningún fin.

La construcción del túnel, realizada en 2008, costó en su momento 34 millones de euros y dispone de dos carriles, arcenes y también aceras. Discurre durante 1,4 kilómetros en paralelo al túnel de Cercanías y la idea original era, precisamente, aliviar el tráfico en esta parte de la ciudad que, a día de hoy, sigue sin tener con problemas de excesiva congestión.

Así lo consideran también desde el Consistorio, dado que el Área de Movilidad no señala un cambio importante en el tráfico en caso de que el túnel estuviera en uso. Por todas esas razones, para el Ayuntamiento lo que es «absolutamente prioritario» en la actualidad es la urbanización de El Portillo, paralelamente a la construcción de viviendas en la zona que ocupara la antigua fábrica de Averly y la anterior estación de ferrocarril.