Un reciente estudio de la Universidad de California en Irvine reveló que el medicamento para bajar de peso, semaglutida, comercializado como Wegovy, tiene el potencial de beneficiar a 93 millones de adultos estadounidenses con sobrepeso u obesidad, disminuyendo en 43 millones el número de personas con esta afección y previniendo hasta 1,5 millones de eventos cardiovasculares adversos durante una década.

La Administración Federal de Medicamentos (FDA) ha aprobado Wegovy, una terapia inyectable que actúa como agonista del receptor del péptido 1 similar al glucagón (GLP1-RA), para el control crónico del peso en adultos que padecen obesidad o sobrepeso con afecciones asociadas, incluyendo hipertensión, diabetes tipo 2 y colesterol elevado.

Las investigaciones sugieren que, con esta terapia, se podría alcanzar una reducción promedio del peso corporal de hasta un 15%.

El estudio, titulado ‘Elegibilidad de la población de EE. UU. e impacto estimado del tratamiento con semaglutida en la prevalencia de la obesidad y los eventos de enfermedades cardiovasculares’, fue dirigido por el Dr. Nathan D. Wong, experto en prevención de enfermedades cardíacas en la División de Cardiología de la Facultad de Medicina de la UCI.

Wong basó su análisis en el ensayo STEP 1 de 2021, el cual demostró que la dosis de 2,4 mg de semaglutida, aprobada por la FDA, reducía el peso corporal en un promedio del 14,9% y disminuía factores de riesgo cardiovascular.

Además de los resultados de la Encuesta Nacional de Examen de Salud y Nutrición, el estudio proyecta que, al tratar a 83 millones de personas sin enfermedades cardiovasculares previas con Wegovy, el riesgo a 10 años de estas afecciones podría reducirse en un 1,8%. Esto se traduciría en un descenso del 18% del riesgo relativo y hasta 1,5 millones de eventos cardiovasculares prevenibles en una década.

Wong destaca el impacto significativo de esta terapia, indicando que «es uno de los mayores avances en el mundo de la obesidad y la medicina cardiovascular». Asimismo, recalca que, además de su estudio original en personas con diabetes, el medicamento debería considerarse para aquellos pacientes con sobrepeso, obesidad y otros factores de riesgo cardiovascular.

No obstante, se subraya la importancia de que los pacientes discutan con sus médicos los posibles efectos secundarios y se recuerda que la base para un control de peso eficaz y reducción del riesgo cardiovascular siempre es una dieta equilibrada y actividad física regular.