En cada ciudad y pueblo de España, es más que problable que se encuentren varios ejemplares de plátano de sombra, uno de los árboles ornamentales más comunes en entornos urbanos. Sin embargo, su belleza y sombra refrescante vienen acompañadas de un creciente problema: las alergias asociadas a su polen.

Este árbol de grandes dimensiones, que puede alcanzar hasta los 40 metros, tiene un origen complejo, fruto del cruce entre especies de Asia, la zona atlántica de EE.UU y otras regiones de climas templados. Su robusto tronco, frondosas hojas y corteza característica lo convierten en una presencia familiar en parques, bulevares y zonas verdes municipales en toda España.

Una de las razones de su popularidad es su rápido crecimiento y su capacidad para adaptarse a condiciones urbanas, soportando cambios extremos de temperatura y no necesitando riegos permanentes. Sin embargo, su periodo de polinización, que se produce principalmente en primavera, ha generado un aumento en las alergias en España.

En los últimos años, el número de personas alérgicas al polen del plátano de sombra ha experimentado un notable aumento. Según un estudio de la alergóloga Ana Novalbos publicado en 2020, del Hospital Universitario QuirónSalud Madrid, los alérgicos a este polen se han multiplicado “desde un 2% en los años 80, hasta un 30% en estudios realizados en 2003 en las grandes ciudades, como Madrid, Barcelona o Zaragoza”.

La Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica (SEAIC) respalda esta preocupación con datos concretos. En Madrid, por ejemplo, se estima que alrededor del 40% de los alérgicos al polen lo son específicamente al polen del plátano de sombra, lo que equivale a aproximadamente 850.000 personas.

Los meses de abril y mayo son los de mayor incidencia de polen de plátano de sombra, aunque este periodo puede variar dependiendo de las condiciones climáticas, adelantándose incluso a marzo o retrasándose hasta principios de junio. Durante la polinización, los árboles liberan grandes cantidades de polen, lo que puede desencadenar síntomas respiratorios y oculares en personas alérgicas.

Los síntomas de la alergia al polen de plátano de sombra incluyen rinitis, conjuntivitis, tos y en casos más graves, asma. Aunque su nombre puede inducir a confusión, no está relacionado con la fruta del mismo nombre, por lo que los alérgicos pueden consumirla sin problemas.

El diagnóstico de la alergia se basa en la historia clínica y pruebas cutáneas específicas, y el tratamiento puede incluir antihistamínicos, colirios, sprays nasales e inhaladores. Además, se puede considerar la administración de una vacuna específica, que puede reducir significativamente los síntomas y mejorar la calidad de vida de los pacientes alérgicos.

A pesar de las alergias asociadas, el plátano de sombra sigue siendo una opción popular en el paisajismo urbano. A pesar de ello, otras ciudades están considerando alternativas y sustituciones por otras especies menos alergénicas.