En los bosques del norte de Turquía, cerca de Mudurnu, se alza un sueño para muchos: Burj Al Babas, la ciudad de castillos «Disney«. Concebida como una lujosa urbe inspirada en los cuentos de hadas y los castillos europeos, esta ciudad en miniatura nunca llegó a ser habitada, a pesar de que casi el 80% de sus 700 castillos fueron construidos.

BURJ AL BABAS Y VIVIR EN DISNEY

El proyecto, iniciado en 2011 por el Grupo Barot, atrajo a inversores y compradores ávidos por una vida de lujo y fantasía. Sin embargo, problemas financieros en 2016 llevaron a su abrupto abandono, dejando tras de sí una ciudad fantasma con todas las comodidades imaginables. La ciudad contaba con piscinas y parques acuáticos e incluso gimnasios y centros comerciales.

Burj Al Babas representa un monumento a la ambición y la extravagancia que, por ahora, permanece como un recordatorio de un sueño.

DISEÑADO PARA EL LUJO

Los planos de Burj Al Babas revelan una cuidadosa planificación para garantizar que sus futuros residentes disfruten de una vida de comodidades y entretenimiento. Además de los castillos individuales, la ciudad estaba destinada a contar con una amplia gama de instalaciones comunitarias, como centros de salud y belleza, cines y restaurantes.

Los amantes del deporte encontrarían su paraíso en esta ciudad, con instalaciones para baloncesto, tenis, fútbol, equitación y más. Incluso había una pista de cuatriciclos para los aventureros ávidos de emociones.

La atención al detalle era evidente en cada aspecto de Burj Al Babas, desde los jardines infantiles hasta los servicios de lavado de autos. Todo estaba diseñado para brindar una experiencia de vida incomparable, donde el lujo y el confort se combinaban.

UN DESTINO ELITISTA

El Burj Al Babas estaba destinado a atraer clientela internacional y fueron las élites de los países del Golfo Pérsico quienes mostraron interés. Los compradores, principalmente de Emiratos Árabes Unidos, Kuwait, Arabia Saudita, Qatar y Bahrein, vieron en esta ciudad abandonada la oportunidad de poseer una residencia de lujo fuera de sus países de origen.

Varios compradores adquirieron parcelas en 2014 con la esperanza de mudarse a esta ciudad de ensueño, pero las circunstancias financieras impidieron que se hiciera realidad.

EL ADIÓS AL SUEÑO DE VIVIR EN DISNEY

Hoy en día, Burj Al Babas yace silenciosa, un monumento a la ambición humana y la fragilidad de los sueños. Las calles vacías y los castillos sin habitar sirven como testigos mudos de lo efímero que puede ser el éxito y la prosperidad.

Aunque su destino sea incierto, la ciudad de castillos «Disney» sigue siendo un destino apetecible para los curiosos y los amantes de la historia urbana. En sus ruinas, se puede encontrar la promesa de una vida de lujo y una lección sobre la importancia de la estabilidad financiera.