En la búsqueda de un gobierno de amplia base y transversal desde la visión del centro derecha aragonés, como pregonó hace poco la portavoz del Gobierno, Mar Vaquero; el Ejecutivo de Azcón va incluso más allá con el nombramiento de Pedro Olloqui, un conocido e histórico exmiembro de Izquierda Unida por su afiliación al Partido Comunista de Aragón. Su nombramiento se encuadra para la gestión de la dirección general de Cultura dentro de la Consejería de Presidencia de un gobierno de PP y Vox con retazos del PAR, de Aragoneses y de varios ex de Ciudadanos.

El nombramiento de Olloqui ha generado más de una sorpresa en el entorno de Azcón y aún más en el seno del Ejecutivo aragonés por la adscripción política comunista del nuevo alto cargo, y aún más cuando debe gestionar las políticas de Cultura del Ejecutivo de Azcón que pretende un cambio notable con las anteriores políticas de izquierdas del gobierno de Lambán.

Y entre todo, aún sorprende más su nombramiento por inscribirse en la Consejería de Presidencia e Interior -según fuentes no oficiales del Gobierno-, ya que habitualmente suele estar esta dirección general en el área de Educación.

Después de las últimas informaciones sobre otros dos directores generales de Vox nombrados hace pocos días, que han levantado un vendaval de críticas por su exaltación del franquismo y de la línea ideológica del falangismo en las redes sociales, Esmeralda Pastor y Jorge Valero.

De hecho, como guinda al pastel del nombramiento de Olloqui, este nuevo responsable del área de Cultura del Gobierno de Azcón deberá compartir Consejería con la directora generala citada de Vox y su filiación franquista. La dirección general de Justicia, con Esmeralda Pastor al frente, y la dirección general de Cultura, con Olloqui como responsable, estarán en la Consejería que gestiona Tomasa Hernández.

LA BIOGRAFIA DE OLLOQUI: DE CONOCIDO COMUNISTA A UN EJECUTIVO DE PP-VOX

Pedro Olloqui Burillo ha experimentado, en sólo dos décadas, una notable transformación en su trayectoria pasando de ser un conocido exdirigente de Izquierda Unida a ocupar el cargo de director general en un gobierno del PP y Vox. Abogado de formación y licenciado en Filosofía y Letras, su papel en las últimas décadas ha sido tan versátil como polivalente.

En 1999 fue elegido miembro del Consejo Social de la Universidad de Zaragoza por el Partido Comunista, representando al Gobierno de Aragón del socialista Marcelino Iglesias. Posteriormente, en 2002, asumió el cargo de gerente de la Oficina de Cooperación al Desarrollo bajo el mismo gobierno. Al año siguiente, se le designó consejero de la CARTV por parte de Izquierda Unida (Corporación Aragonesa de Radio y Televisión), donde permaneció hasta 2009, cuando Marcelino Iglesias lo nombró gerente de la Fundación Montañana Medieval, una fundación participada por Ibercaja, la Diócesis de Barbastro – Monzón, entre otros.

Además ejerció dentro de la promoción privada de inmuebles con el Grupo Progea, una sociedad vinculada a Izquierda Unida que entró en concurso de acreedores por arrastrar una deuda de 150 millones de euros.

Tras estos giros en su carrera política y en la gestión dio el salto al sector audiovisual de la mano del Grupo Henneo, antes Grupo Heraldo. Fue hace poco más de diez años cuando desempeñó el cargo de presidente de Factoría Plural, la productora audiovisual que a día de hoy gestiona gran parte de la programación de Aragón Televisión. De ahí ascendió a la vicepresidencia de la Academia de Televisión. Es ahora cuando cambia de tercio y deberá gestionar la Cultura del Gobierno aragonés de PP y Vox.

Entre sus retos, se incluirá la promoción de la tauromaquia, la consecución de una gran exposición itinerante sobre la Corona de Aragón como parte de la formación de España o la promoción de los escenarios religiosos como parte de la identidad aragonesa, según se recoge en el ADN de un gobierno de PP y Vox, que será defendido por el que fue militante comunista Pedro Olloqui.