Los militantes socialistas en Aragón han mostrado un respaldo moderado hacia los acuerdos de investidura promovidos por Pedro Sánchez, según los resultados de la reciente consulta llevada a cabo por el partido.

Un 82,35% de los participantes aragoneses apoyó la propuesta de pacto, una cifra que, si bien es notable, queda por debajo de la media nacional del 87,13%.

La votación en Aragón vio una participación del 51,28% de sus 6.673 afiliados al partido, situándose como la segunda comunidad con menor participación después de Asturias. De los votantes, 2.818 se expresaron afirmativamente hacia los pactos propuestos por Sánchez, mientras que 548, equivalente al 16%, se opusieron.

Además, se contabilizaron 56 votos en blanco o nulos, representando el 1,64% del total emitido.

A nivel nacional, la comunidad de Castilla-La Mancha, bajo la presidencia de Emiliano García-Page —quien ha mantenido una postura crítica hacia la ley de amnistía—, ha registrado el apoyo más bajo con un 78,57% de votos afirmativos.

La consulta fue convocada para que los afiliados socialistas dieran su veredicto sobre el acuerdo gubernamental ya establecido con la coalición Sumar y sobre los pactos necesarios con otros partidos políticos, incluyendo ERC y la aún pendiente Junts, para asegurar la mayoría necesaria en la investidura. La pregunta formulada evitó mencionar explícitamente la polémica ley de amnistía, punto crucial para ERC y Junts en su apoyo a Sánchez.

En todas las comunidades autónomas, las federaciones socialistas han respondido afirmativamente en su gran mayoría, aunque con variaciones significativas entre las distintas regiones, de acuerdo con los datos facilitados por el PSOE, con un 99% del escrutinio completado.

Mientras que la Comunidad Valenciana, Canarias y el País Vasco han mostrado los niveles más altos de aprobación, con porcentajes que superan el 90%, Castilla-La Mancha ha destacado por un respaldo más comedido. En esta última, participó el 60,60% de los militantes, con 5.426 votando a favor y 1.368 en contra.

En las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla, con un censo más pequeño, el apoyo ha sido notablemente alto, con más del 91% en ambas.