El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha decidido romper su silencio tras las acusaciones infundadas dirigidas hacia su esposa, Begoña Gómez, vinculándola al caso Koldo. En una carta compartida en su cuenta personal de redes sociales, Sánchez expresó su preocupación por los ataques recibidos y la necesidad de responder de manera serena.

«La gravedad de los ataques que estamos recibiendo mi esposa y yo, y la necesidad de dar una respuesta sosegada, me hacen pensar que esta es la mejor vía para expresar mi opinión«, ha escrito en una carta publicada en su cuenta personal de X (antes conocida como Twitter).

En su comunicado, el presidente reafirmó la inocencia de su esposa y su disposición a colaborar con la justicia para esclarecer los hechos. Además, anunció la cancelación de su agenda y dejó entrever la posibilidad de replantearse su continuidad como presidente del Gobierno ante las «falsedades» difundidas por medios de «orientación derechista y ultraderechistas».

Estas declaraciones surgen después de que el pseudosindicato Manos Limpias presentara una denuncia contra Begoña Gómez, lo que llevó al juez Juan Carlos Peinado a abrir diligencias de investigación, declaradas secretas. El presidente, en sesión de control al Gobierno en el Congreso, manifestó su confianza en la justicia, aunque sin hacer referencia directa al caso.

Varios miembros de su gobierno, incluyendo al ministro de la Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños, salieron en defensa de Gómez, calificando las acusaciones de falsas y condenando los intentos de dañar su reputación sin pruebas. El portavoz del PSOE en el Congreso, Patxi López, respaldó esta postura, reafirmando el compromiso del partido con la verdad y la justicia.