Dos de cada tres estudiantes o trabajadores de universidades europeas han experimentado algún tipo de violencia (violación, agresión sexual o machismo) al menos una vez desde que iniciaron sus estudios o labores. Esta categoría de violencia incluye desde violencia machista y sexual hasta LGTBIfobia.

Este alarmante hallazgo es el resultado de la encuesta más amplia jamás realizada en campus y centros de investigación europeos sobre la violencia de género.

Como parte del proyecto UniSAFE, se entrevistó de forma anónima a 40.000 individuos de la comunidad académica de 46 universidades de 15 países, entre ellos, algunas instituciones de España.

Lo más preocupante es que, más allá de la prevalencia de la violencia, esta parece ser una problemática invisible que requiere de acciones inmediatas y contundentes para ser erradicada.

De los encuestados, el 62% afirmó haber sido víctima de alguna forma de violencia de género durante su paso por la universidad. Estos números son aún más alarmantes cuando se observa a las mujeres y a miembros de diversos grupos minoritarios.

El 68% de los encuestados que se identifican como parte del colectivo LGTBI han enfrentado esta violencia. Las cifras son aún más altas para miembros de minorías étnicas, con un 69%, y aún más preocupantes para personas con discapacidades o enfermedades crónicas, llegando al 72%.

Aunque hay variaciones en la gravedad de los actos violentos reportados, los números pintan un panorama sombrío.

La violencia psicológica lidera con el 57% de los incidentes, pero un 31% de los entrevistados declaró haber experimentado acoso sexual o sexista de primera mano.

Por otro lado, el 10% señaló que su desempeño académico o laboral fue afectado por violencia económica, mientras que un 6% fue víctima de violencia física y un 3% sufrió agresiones sexuales.