Con el mercado de fichajes bastante parado, pero con varios movimientos muy encaminados, el Real Zaragoza ya trabaja de cara a la próxima temporada, en la que el ascenso será el principal objetivo. La última campaña tiene que servir para no repetir los errores que le llevaban al club a luchar por una permanencia que llegó en la penúltima jornada. 

Fernando López, el nuevo director general del club aragonés, tiene varios frentes abiertos, con muchas decisiones inminentes. Su trabajo será fundamental para continuar con el crecimiento del club blanquillo. 

REUBICACIÓN DE ABONADOS DE GOL SUR

El primero de los retos que tiene por delante Fernando López será el de poner en marcha una campaña de abonados que tendrá la problemática añadida de la reubicación de todos los socios de Gol Sur, grada que será demolida en las próximas semanas. El club, tal y cómo anunció en un comunicado, no subirá el precio de los abonos de cara a la próxima temporada. 

LÍMITE SALARIAL DEL REAL ZARAGOZA

Conseguir un límite salarial más alto que en la anterior campaña será otra de las gestiones en las que tendrá que trabajar codo con codo Fernando López y la dirección deportiva, comandada por Víctor Fernández y Juan Carlos Cordero. 

El nuevo director general tendrá que manejar junto a la propiedad los presupuestos a destinar a la plantilla deportiva. La búsqueda de nuevos patrocinadores y fuentes de ingresos extra será otro de los puntos clave para poder manejar un límite salarial mayor.

NEXO DE UNIÓN ENTRE EL CLUB Y LA PROPIEDAD

Fernando López, cómo ya sucedía con Raúl Sanllehí, será el hombre de confianza de la propiedad y el que gestionará el día a día la entidad blanquilla. La relación con los trabajadores, continuar con la modernización del club en todas sus áreas y seguir de cerca el nuevo proyecto de La Romareda ocuparán buena parte del trabajo del ex CEO del Atlético Ottawa. 

El director general zaragocista ya trabaja en el club desde la pasada semana, cuando se presentó a todos los trabajadores y conoció las instalaciones del Real Zaragoza. Un reto mayúsculo el que tiene por delante